El juez decretó ayer la libertad con cargos bajo fianza para el productor Harvey Weinstein al que acusa de cuatro delitos sexuales. Weinstein, que se declaró no culpable de todos los cargos, debe abonar una fianza de un millón de dólares (853.000 euros) en efectivo o un aval de diez millones de dólares para quedar en libertad. Además, el juez le retiró el pasaporte y limitó sus viajes, obligándole a llevar un dispositivo de localización.

La Fiscalía del distrito de Manhattan informó que Harvey Weinstein fue procesado y acusado de cuatro delitos sexuales, entre ellos el de violación y abuso sexual en relación con dos mujeres. Los hechos tuvieron lugar en 2004 y 2013.

«Los cargos de hoy reflejan un progreso significativo en esta investigación activa y en curso. Agradezco a los valientes supervivientes que se presentaron y a los fiscales de mi oficina que han trabajado incansablemente en esta investigación», afirmó el fiscal Cy Vance.

Weinstein, que se declara no culpable de los delitos de los que se acusa, se entregó ayer viernes a la policía de Nueva York personándose en la comisaria del barrio de Tribeca cerca de las 7.30 de la mañana con tres libros bajo el brazo derecho, entre ellos una biografía de Elia Kazan, director de La ley del silencio y rechazado por gran parte de Hollywood por delatar a varios excompañeros en la «caza de brujas» desatada por McCarthy.

Más de 70 mujeres acusaron al cofundador del estudio Miramax y The Weinstein Co de conducta sexual inapropiada, incluyendo violaciones. Estas denuncias dieron lugar al movimiento #MeToo en el que cientos de mujeres han acusado públicamente a hombres poderosos en los negocios, el gobierno y el entretenimiento.

En este sentido, esta misma semana, y tras el testimonio de ocho mujeres que aseguraban que Morgan Freeman las había acosado sexualmente o, en otros casos, molestado con comentarios inapropiados de carácter sexual en el entorno de trabajo, el conocido actor estadounidense ha emitido un comunicado en el que expresa sus disculpas por hacer que esas mujeres se sintieran «incómodas».