Personalidades del mundo de la cultura valenciana reaccionaron este jueves ante el nombramiento de Màxim Huerta como titular del Ministerio de Cultura.

El conseller del ramo, Vicent Marzà, señala que "vamos a seguir reivindicando lo que es justo y que hemos venido reivindicando hasta ahora. Le deseamos aciertos porque serán de todos y estamos a su lado. No entramos a valorar su nombramiento porque lo que queremos son políticas. Cuando las ponga en macha las valoraremos. Pude hablar con él y felicitarle y queremos aprovechar esa normalidad y que lleguen las mejores políticas culturales. Desde el sector y la Generalitat se está haciendo el trabajo. Estamos ante un cambio de paradigma".

Carmen Amoraga, directora general de Cultura, le pediría al nuevo ministro "una reunión para que que conocieran de primera mano la realidad cultural de la Comunitat Valenciana, para hablarles de la clara discriminación presupuestaria que sufrimos en comparación con otras autonomías en el reparto de los presupuestos estatales". "La marginación de los espacios culturales valencianos en los presupuestos es escandalosa, como el caso del Palau de les Arts, del Museo de Bellas Artes, o del IVAM. Y un mayor compromiso de inversiones en general. Les invitaría a pisar nuestro territorio, que es el suyo, con ojos de ministro y conocer in situ nuestro patrimonio, para disfrutarlo y para conocer los problemas que sufre. Les pediría que inviertan en nuestro patrimonio de forma decidida, a través del 1,5 % Cultural. Este año, sólo se han previsto dos actuaciones en nuestro territorio a través de este mecanismo y esta misma semana ha salido la nueva convocatoria. Que se pensara en Cultura como un derecho, derecho a disfrutarla pero también derecho a vivir de ella. Que bajen realmente el IVA cultural".

La concejala de Cultura, Glòria Tello, señala la importancia de "aplicar la ley de la memoria histórica, que dejaran de maltratar a nuestros recintos culturales y las subvencionen a los niveles de los del resto del país. Me refiero a Les Arts, IVAM, Museo de Bellas Artes... Que nos devuelvan las puertas del retablo de Van der Stock, que apuesten por la recuperación del patrimonio histórico y cultural, que contemplen la eliminación de las limitaciones de contratación de personal en entidades como la Banda Municipal o la Orquesta de València. A su vez pediría que trabajara por revertir la precariedad de los profesionales que se dedican a la cultura, creando leyes que ampare a los colectivos y exigiendo regulaciones y derechos para estos profesionales".

Por su parte, Susana Lloret, directora de la Fundació Per Amor a l'Art y presidenta de Les Arts asegura que "prefiero valorar su trabajo cuando haya tenido tiempo de desempeñar su cargo.

En este momento de cambio -en el Gobierno y en Les Arts- el nuevo ministro tiene la oportunidad de dar a Les Arts el apoyo que merece, aceptando nuestra invitación a entrar en nuestro nuevo patronato. Es el momento de resolver una situación difícil de sostener".

Vicent Ros, director del Palau de la Música, explica que "siempre supone una gran noticia la presencia de ministros valencianos en el gobierno. El sector cultural necesita una sensibilización especial, la rebaja del IVA cultural, una ley de mecenazgo efectiva, una implicación y apoyo económico no sólo a los teatros de ópera sino a todos los auditorios del estado y que luche por cambiar la ley de tasa de reposición de empleo público, que nos impide sacar más plazas en las orquestas. Esperamos que la interlocución sea muy fluida".

José Ignacio Casar Pinazo, como director del Museo de Bellas Artes, apunta que "Màxim Huerta tiene un reto difícil a nivel personal: hay un magnífico precedente de ministra de cultura valenciana. Sin duda, puede utilizarse su gestión para sentar las bases de un nuevo tratamiento institucional de los museos de titularidad estatal y gestión trasferida que, como el Museo de Bellas Artes de València, cuenta con colecciones de primerísimo nivel y con administraciones gestoras con ganas de apostar y mejorar los museos de referencia. Hay que negociar una solución que facilite y aumente la autonomía del Museo para profesionalizar su gestión y mejorar su capacidad de respuesta antes los fines que le son encomendados. La Generalitat apostó en 2017 por la figura de un ente consorciado, apuesta que el anterior Ministerio valoró negativamente. Luego, algo habrá que hacer. Por otra parte, el Museo ha hecho sus deberes con el plan museológico y el discurso expositivo siguiendo las instrucciones del Ministerio y de acuerdo con las directrices de la comisión técnica interinstitucional creada al efecto, por lo que le corresponde al Ministerio licitar y redactar el proyecto museográfico y la subsiguiente obra de museografía, lo que permitirá reordenar las colecciones y abrir la llamada quinta fase. Esas licitaciones deben programarse ya. Y finalmente, la ciudad reclama una mejora del entorno urbano en el que se asienta el Museo. Debe impulsarse el principio de acuerdo entre el Ayuntamiento de València y el Ministerio para la reordenación de su entorno y la mejora de la implantación del Museo respecto a los Jardines del Real y la calle Volta de Rossinyol".

El escritor Fernando Delgado también tiene palabras para Huerta: "En Cultura no necesitamos a un creador, sea quién sea, lo sea o no, necesitamos a un buen gestor. Espero que Huerta lo sea. Y en cuanto a la reivindicación que haría es la más importante para mí la federalización de la Cultura. Más que un ministerio se necesita un Consejo Federal de Cultura".

Además, Lorena Palau, de Rambleta, señala que "el nombramiento me ha sorprendido, confío en que tenga la actitud para dar la relevancia que merece el ámbito al que representa y para trabajar cubriendo las necesidades reales del mismo".