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Juan Diego Botto: "El sentimiento que me impulsa a escribir es la rabia"

- El actor y autor reflexiona sobre teatro y compromiso en las actividades de la Fundación Cañada Blanch en la Nau

El actor Juan Diego Botto, ayer, en la sede de la Fundación Cañada Blanch. germán caballero

El título del encuentro que protagonizó ayer en la Nau de la Universitat de València le venía como anillo al dedo: «Teatro y compromiso». El actor Juan Diego Botto (Buenos Aires, 1975) fue el encargado de abrir la nueva temporada de actividades de la Fundación Cañada Blanch. Allí aseguró que «todas las historias centradas en la crisis se han contado en teatro».

En este sentido, resaltó la «inmediatez» de la tablas frente a la televisión o el cine, que «tienen unos filtros enormes». «Desde que grabas hasta que se emite pueden pasar meses», dijo en cuanto a los formatos audiovisuales.

Sobre el teatro que hace como actor y director aseguró que «es mi forma de entenderlo, el que me sale». «Cuando escribo todo tiene que ver con la realidad del mundo en el que vivo». De ahí que sostenga que «todo tipo de arte ofrece un punto de vista y nunca puede ser acrítico». «Todo arte comprende un compromiso», dijo. «A veces tendemos a pensar que reforzar una opinión mayoritaria es no tener una opinión», reflexionó.

En cuanto a la relación entre política y teatro señaló que para él ambos plantean cuestiones. «Lo más audaz es acertar en plantear esas preguntas». «La tensión social existe y el arte trata de reflejarla». De hecho, subrayó, «esa ha sido la función del arte».

Para el actor nacido en Buenos Aires, pero afincado en Madrid desde los tres años «el arte nace como necesidad de una poner en común tus vivencias» y «todo lo que no implique una necesidad social tenderá a desaparecer».

De ahí que dijera rotundo lo que le impulsa en su faceta como creador: «Lo que me impulsa a escribir es la rabia». Además, añadió que «la materia prima del teatro son tus vivencias, tu cuerpo, tu voz». Por ello, «a medida que cumples años estas son mejores y esa materia prima va madurando». «Todo está presente a la hora de desplegar tu arte porque sabes más de la vida y lo expresas de otra manera».

En estos tiempos de Twitter, denuncias y debates en torno a la libertad de expresión, Botto explicó que «a la hora de hacer teatro me he cuidado mucho de medirme, de ser muy riguroso», aunque descartó haberse puesto límites. «Otro asunto son los proyectos que impliquen dinero de terceros, que esos ya tienen más filtros», incidió. Así, respecto a las polémicas alrededor de la libertad de expresión en redes sociales, Botto aseguró que «es un pilar fundamental, es lo que nos permite discrepar y, al mismo tiempo, tender puentes y crear lazos». «En esto están de acuerdo incluso los que aplican la censura», ironizó el protagonista de películas como Martín Hache.

En cuanto al estado de salud del teatro, Botto incidió en que uno de los principales problemas con los que se encuentra el sector es la economía y la administración. «Hay espacios culturales que podrían estar mejor explotados. No ha habido mucha preocupación por los contenidos», criticó. «Es difícil ser un dramaturgo joven y vivir de tu trabajo», lamentó.

Durante su participación en el encuentro, el actor habló sobre su trayectoria profesional y su último proyecto: la nueva pieza teatral, «Una noche sin luna», un texto sobre Federico García Lorca y la noche de su asesinato, que se estrenará a mediados de enero. Para él, «Lorca ha sido siempre una obsesión». Sin embargo, reconoció que esta obra surgió como «algo más humilde, de entretiempo, de hacer entre serie y serie». «Pero me fui liando», dice entre risas. «Hablé con estudiosos y biógrafos de Lorca y al final la obra tiene dos pilares: la libertad de expresión y la memoria histórica», dijo sin querer desvelar demasiado sobre la pieza. «No es una mirada habitual sobre Lorca», añadió.

Respecto a sus trabajos en EE UU señaló que allí «los directores, guionistas y actores tienen más tiempo» para preparar sus trabajos. «No es que sean mejores en EE UU que en España».

Diálogos culturales

Por su parte, Cañada Blanch tiene en agenda ofrecer nuevos diálogos en materia cultural entre los que destaca el previsto con el escritor Antonio Orihuela y Ana Santos Aramburo, directora general de la Biblioteca Nacional. Una ocasión que servirá para hablar sobre el futuro de las pequeñas editoriales, conducido por el vicerrector de Cultura y Deportes, Antonio Ariño, dentro del marco del Festival del libro Sindokma, que se celebrará en las instalaciones de la Nau, del 25 al 28 de octubre.

Ya en noviembre la fundación acogerá la presentación de Susana Chillida que hablará de la película sobre su padre, el artista Eduardo Chillida, y del escritor Eduardo Iglesias quien dará a conocer su nueva novela.

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