Puede parecer atrevido decir que las artes escénicas viven un buen momento. Si se acude al sector, a los profesionales que lo componen, es posible que las opiniones sean diversas y hasta quien se eche las manos a la cabeza. Sin embargo, los datos que baraja la SGAE apuntan a cierto optimismo. Tanto es así que el organismo asegura que el sector de las artes escénicas salió en 2017 de la crisis y que por primera vez desde 2008 ha tenido un crecimiento del 1,2 % respecto a 2016 en su recaudación, una subida «leve» frente a la de 17,53 % que ha experimentado la música grabada, sobre todo gracias a la música digital.
Son datos del Anuario SGAE 2018 de las Artes Escénicas, Musicales y Audiovisuales que ayer se presentó en la sede de la Sociedad General de Autores y Editores con la presencia de su presidente en funciones, José Miguel Fernández Sastrón, quien expresó que el sector cultural vivió el pasado año un «tímido crecimiento» respecto a los últimos diez años. Según este informe, las artes escénicas (teatro, circo, lírica, y danza) vivieron el pasado año un cambio de sentido al experimentar un crecimiento del 0,3 % en el número de representaciones, un 0,7 % en la asistencia y un 1,2 % en su recaudación.
Por sectores, el teatro es el que más peso tiene y supuso un 93 % de las representaciones de artes escénicas celebradas en 2017. En total durante este ejercicio el teatro obtuvo una recaudación de 202 millones de euros. «Este año por primera vez el número de representaciones pasa el momento de frenada», matizó Rubén Gutiérrez, director de Desarrollo de la Fundación SGAE y autor del informe. La danza, por el contrario, recaudó en 2017 un total de 8,39 millones de euros en 2017, un 2,1 % más respecto a 2016.
Respecto al sector musical, Gutiérrez manifestó que el valor de las ventas crece pero «principalmente por el valor de las ventas en el sector digital», cuya recaudación fue de 231,716 millones de euros, un 17,53 % más respecto a 2016. Estos datos contrastan con la música grabada en el mercado físico, «en caída libre» acumulando un 67 % de pérdidas respecto a 2008, año en el que el estudio marca el inicio de la crisis.
Según destacó también durante la presentación, la música clásica mantiene la tendencia alcista de los últimos años pero su «lenta recuperación» no ha conseguido compensar las pérdidas que acumula desde 2008. La recaudación en 2017 en los conciertos de música clásica fue de 42,91 millones de euros, un 8,4 % más que en el pasado año.
El cine, por su parte, sigue cayendo tanto en recaudación como en asistencia, principalmente debido al incremento del IVA en el precio de las entradas al 21 % -cuya rebaja al 10 % se llevó a cabo a principios de año- y los cambios en el hábito de consumo con las plataformas digitales. Así, en 2017, cuando se recaudaron 593 millones de euros, hay un descenso del 2,31 % respecto a 2016, con 607 millones, mientras en asistencia ha bajado un 2,22 %.
El anuario destaca también en uno de sus apartados a la música popular en vivo (todo lo que no es música clásica) que sigue cayendo aunque la tendencia se «reduce» y se entra «en una frenada importante» de recaudación de un -0,38 %. Eso sí, respecto a los macrofestivales el informe destaca cómo han tenido en 2017 un aumento del 10,51% en su recaudación, 328,889 millones de euros respecto a los 297,619 del pasado año. «Los festivales son un motor muy importante, hay que cuidarlo y eliminar determinadas burbujas», alertó Gutiérrez sobre este mercado que «sostiene» el mercado de la música popular en directo.
El sector de la televisión vio como el pasado año sus minutos de visionado bajaron un 2,17 % hasta los 225 minutos de visionado, pero sus ingresos por publicidad crecieron un 0,99 % porque, en palabras de Gutiérrez, «sigue siendo un mercado atractivo para los anunciantes».
Por último, el sector de los videojuegos, que goza de una «buena salud», tuvo un crecimiento del 13 % en sus ingresos respecto a un años antes, una subida que se refleja en un crecimiento de los ingresos obtenidos por la venta de consolas, videojuegos o accesorios.
