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Natalia de Molina: "Cuando me sienta cómoda me preocuparé"

La actriz y ganadora de dos premios Goya presenta en València su última película, "Animales sin collar"

Con dos premios Goya en su haber -por Vivir es fácil con los ojos cerrados (2013) y Techo y comida (2015)- Natalia de Molina (Linares, 1990) se mete en Animales sin collar en la piel de Nora, la joven esposa del nuevo presidente de la Junta de Andalucía.

De Molina estuvo ayer en València en los cines Kinépolis de Paterna, para presentar la cinta -dirigida por Jota Linares- en el marco de los Preestrenos del Festival Antonio Ferrandis. Según explica la propia De Molina a Levante-EMV, la película representa «esa otra realidad paralela en la que un nuevo político gana las elecciones. Ella es un ama de casa enamorada de su marido y su felicidad es la de él, pero guarda un secreto que, si sale a la luz, dinamitaría todo lo que han conseguido juntos. La película es el viaje de autodescubrimiento y liberación de la mujer», explica la actriz.

Se ríe sobre la posibilidad de que la cinta esté basada en hechos reales o inspirada en algún político en concreto. «Estamos asistiendo a noticias que tratan sobre los trapos sucios y, sí, hay cierto paralelismo, pero han surgido una vez rodada y montada la película. La realidad supera la ficción».

Aunque este es el debut del gaditano Jota Linares en el largometraje y De Molina -pese a su juventud- ya lleva una trayectoria notable, asegura que «el director siempre es el que enseña» al actor. «Soy joven y creo que este trabajo es como el de los médicos: siempre hay algo nuevo que aprender e investigar del ser humano, en su faceta psicológica y filosófica. Nunca puedes decir que lo sabes todo», asegura.

Actriz comprometida

Es de las afortunadas que elige lo que hace. «Después de Vivir es fácil con los ojos cerrados no he hecho nada en lo que no haya creído. Nunca he hecho algo porque sí o por el miedo a que no me llamen en un tiempo. Si mañana no me vuelven a llamar lo pasaré muy mal, pero ¿y lo que he podido hacer? Estoy cumpliendo el sueño de muchos actores y tengo mucho compromiso con cada cosa que hago», dice agradecida.

Ese pensar que aún es aprendiz le lleva a decir que «no me siento a gusto en ningún género», aunque haya tocado muchos palos. «Siempre tengo miedo a decir 'no sé si voy a ser capaz de hacer esto'. He hecho más drama, pero la comedia es un drama llevado al extremo. Y también he hecho terror. Quiero seguir probando. Me encantaría hacer acción. No quiero sentirme cómoda en ningún género, es lo que me hace sentir que he aprendido cuando acabo un proyecto. El día que me sienta cómoda me preocuparé». Y aunque ha estado muy centrada en el cine, siente un amor muy especial por el teatro. «Tengo muchas ganas de hacer teatro; me gusta sentir esa energía en directo con el público y vivir el personaje de principio a fin».

Como espectadora de cine español asegura que le gusta lo que ve. «Hay cosas muy interesantes. Hay películas increíbles pero que no llegan a mucho público. Me gustaría que tuvieran la misma visibilidad que otras», lamenta.

Es una actriz comprometida con los tiempos que le ha tocado vivir y con su sociedad. Sobre la reivindicaciones feministas considera que «todo sigue igual cuando enciendes la tele y ves que hay otra mujer muerta por violencia de género. El 8M fue una realidad en la que millones de mujeres gritamos cosas básicas y que parece increíble que aún en 2018 estemos pidiéndolas. Hay más conciencia de la mujer, de defender y reivindicar, pero a la vez los números de asesinadas son escalofriantes», critica.

No parece que le guste presumir de Goya. Tiene dos, en la entrada de su casa. Bueno, ahora en cajas porque se está mudando. «Lo de los Goya es curioso porque siento que no me los dan a mí, sino a la película y al personaje que interpreto», explica la actriz andaluza.

Mientras tanto, tiene varios proyectos en marcha: ¿Quién te cantará?, de Carlos Vermut, y Elisa y Marcela, de Isabel Coixet, que cuenta la historia del primer matrimonio homosexual de España en 1901 entre dos maestras gallegas. «Este trabajo es muy especial por la mirada de Isabel, por mi compañera y por la historia en sí. Estoy contenta porque las películas que he hecho este año son increíbles porque me han ayudado a mí pero también pueden ayudar a otras personas. Y esto me pasa con esta. Estas dos mujeres fueron heroínas por querer amarse; es un mensaje a reivindicar tan importante ahora que hay tanto odio», concluye De Molina.

Estreno el 19 de octubre

Animales sin collar, que se estrena el próximo viernes 19 en los cines de toda España, transcurre en un cortijo aislado en mitad de la campiña andaluza. Es el escenario del triunfo de Abel (Daniel Grao) y Nora (Natalia de Molina). Él es un político entregado a la lucha por los más desfavorecidos y acaba de hacer historia, ella es su mujer y guardiana de un secreto que puede cambiarlo todo. La promesa de una nueva vida para ambos se ve truncada por la aparición de Víctor, un alto cargo caído en desgracia. Todos creen llevar el control de una situación donde cada revelación descubre nuevos interrogantes. Vida, amor, dolor, muerte, ambición y redención se mezclarán durante tres días tras los que nada volverá a ser igual para ninguno de ellos.

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