Ortifus marinero, comprometido (¿acaso hay otro?), cultural y fallero. Las múltiples caras del veterano humorista gráfico de Levante-EMV, Antonio Ortiz Fuster, Ortifus, se exhiben bajo el mismo techo: el Edificio del Reloj.

Desde mañana y hasta el 3 de marzo el espacio reunirá 70 viñetas del dibujante valenciano en una exposición titulada «Ortifus, al mar-íntim». Son obras creadas por Ortifus entre 2006 y la actualidad y que han sido publicadas en las páginas de este diario y otras de sus publicaciones habituales.

Según explica el dibujante, «se han elegido viñetas de humor blanco, pero comprometido y social». «Tengo la suerte de hacer un tipo de dibujo que quita seriedad y pone amabilidad», apunta.

Explica que la idea de la exposición -«una especie de retrospectiva», dice- se la plantearon hace un año aunque él, asegura, se veía «incapaz» de bucear en sus archivos y elegir las obras que formarían parte de la exposición. «Me pasa cada vez que me plantean hacer una».

«Es que en toda mi vida habré hecho ya 38.000 viñetas. calculo que unas 1.000 al año», explica. De ahí que haya necesitado a la historiadora Ester Medán para la selección de las viñetas y que es la comisaria de la exposición.

El recorrido en la planta baja del Edificio del Reloj se distribuye en tres secciones: los barrios marítimos, su compromiso social y medio ambiental, y su defensa de la cultura valenciana.

Así, la Semana Santa Marinera, el mar y la playa, el Corredor Mediterráneo o la plataforma Salvem El Cabanyal protagonizan algunos de los dibujos de Ortifus al inicio de la muestra. Continúa el itinerario con el Ortifus más comprometido socialmente y reivindicativo medioambientalmente: temas sobre la justicia, la igualdad de género, la inmigración o la relación del hombre con la naturaleza centran esta mirada.

La exposición concluye con una mirada a la cultura valenciana, Fallas incluidas. Lengua, tradiciones o la gastronomía son algunos de los detalles que recogen sus dibujos en los que se homenajean iconos como la paella, la fiesta de la Tomatina, las bandas de música y, por supuesto, aquellos declarados Patrimonio de la Humanidad como el Tribunal de las Aguas, la Muixeranga de Algemesí y las Fallas.

Desde los años 80, Ortifus ha contribuido al mundo fallero con cinco fallas que podrían calificarse de autor ya que son monumentos monotemáticos, con textos con cortos juegos de palabras y con personajes que habitan habitualmente en sus viñetas. Se exhibirán los bocetos de la falla que en 1988 plantó en la plaza del Ayuntamiento, así como los cuatro monumentos que ha diseñado para comisiones de la sección especial que le han permitido conseguir importantes galardones en la categoría de Ingenio y Gracia.

Se trata del monumento que en 1994 plantó la Falla Blanquerías bajo el lema Camas, una crítica sobre el sistema sanitario; en 1998 el monumento de la Falla Convento Jerusalén con el lema Clon, clon, centrado en la primera clonación un mamífero; en 2000 el monumento para la Falla Na Jordana que habla sobre la nuclearización de la sociedad; o en 2014 el monumento nuevamente para Na Jordana que satirizaba la crisis económica y el sistema bancario.