Después de que el patronato de la Fundación Centro de Estudios Blasco Ibáñez diese por vencido el convenio con el Ayuntamiento, son cada vez son más las voces que apoyan la decisión de acudir a los tribunales para resolver el conflicto del legado del novelista. La última ha sido la de la concejala de Patrimonio y Recursos Culturales del Ayuntamiento de València, Glòria Tello. Preguntada por la intención de la Fundación Centros de Estudios Vicente Blasco Ibáñez durante la presentación del proyecto del nuevo centro de animales de la ciudad esta mañana, la edila ha aseverado que la decisión de ir a los tribunales le parece "la única posible".

Tello ampara su declaración en la existencia de un informe jurídico firmado por el abogado de la ciudad. Este considera que la parte de los fondos museísticos que constituye el "punto de discordia" es de propiedad municipal. Un documento en manos del consistorio al que Tello se acoge para defender la potestad del legado de Blasco Ibáñez. "La única alternativa", ha indicado, "es que la Fundación consiga un informe jurídico diferente". "Si es que eso es posible", ha recalcado, "porque los servicios jurídicos del Ayuntamiento lo tienen clarísimo". Es por ello que Tello ha advertido que hasta que no exista ese documento no dará unos fondos que "son de la sociedad valenciana" a ninguna fundación. Reconoce, por tanto, que ante tal conflicto, "más técnico que político", lo más "correcto" es zanjarlo en los tribunales.

La intención de la Fundación de reclamar la totalidad del legado del escritor, incluida la parte del Ayuntamiento, podría suponer que el legado del escritor saliese definitivamente del "Cap i casal" (actualmente custodiado en la Casa-Museo ubicada en la Malva-rosa de València). Una decisión que la concejala reconoce como una "manera de presión" y con la que se ha mostrado en total desacuerdo, más aún después de asegurar que "la corporación local se ha portado bien con la fundación desde el principio".