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Los valencianos leen y compran más libros que hace un año

Los lectores de la Comunitat Valenciana adquirieron en 2018 una media de nueve ejemplares - El género favorito es la novela

Los valencianos leen y compran más libros que hace un año

Los valencianos compran y leen más libros que hace un año. Así lo revela el «Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros 2018», elaborado por la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE).

Según el trabajo, los residentes en la Comunitat Valenciana superan la media española en ambos indicadores. En toda España, un 61,8 % de los encuestados se definía como lector en su tiempo libre, mientras que a la misma cuestión, un 62 % de los valencianos respondió en esa dirección. Este dato sitúa a la Comunitat Valenciana en el séptimo puesto del listado autonómico. En 2017 leyó un 61,2 % de los valencianos. En cuanto a la compra de ejemplares la tendencia en la C. Valenciana es similar. Mientras la media nacional sitúa a los compradores en un 50 %, un 51,8 % de los valencianos se considera comprador. Esta cifra les sitúa en el sexto puesto autonómico. Además, los valencianos dijeron comprar un media de 9,2 libros durante el pasado año.

En cuanto al perfil del lector habitual, el informe destaca a las mujeres frente a los hombres. Las mayores diferencias se producen en el tramo de edad entre 25 y 39 años. Los jóvenes entre 14 y 24 años se mantienen como el grupo de población adulta más lectora. A partir de esta edad hay un descenso en el hábito. Tanto hombres como mujeres lo recuperan a partir de los 35 años.

El barómetro también refleja cómo la lectura crece a medida que aumenta el nivel formativo. El 82,8 % de los universitarios son lectores en tiempo libre. «También se observa un crecimiento del índice de lectura entre la población con estudios primarios», destaca. Otro dato que recoge este estudio es el número de libros que existen en el hogar. La media de libros se sitúa en 233 libros por hogar, si bien el 62,6 % señaló que en su hogar no se superaban los 100 libros. En cuanto a la materia del último libro leído, el 72,5 % reconoció que se trataba de novela o cuento. Un 13,7 % apuntó a un ensayo de humanidades y ciencias sociales. La mayoría, el 90,3 %, se decantó por un libro escrito en español.

Motivos de la falta de hábito

Pero, ¿por qué no leen algunos españoles? El informe de la FGEE también tiene respuesta para esto: la falta de tiempo es el motivo principal (49,3 %), especialmente entre el grupo de población con edades comprendidas entre 35 y 44 años. Sin embargo, un 32,2 % señala que no lee porque no les gusta o no les interesa. El 36,5 % de los mayores de 65 años señala que las razones para no leer es que prefieren emplear su tiempo libre en otros entretenimientos, una cifra similar entre el grupo de población entre 14 y 24 años. Un 31,5 % de los mayores de 65 años también señala motivos de salud.

El barómetro también ha incluido, por primera vez, un análisis sobre la percepción de la lectura. Leer se percibe como una actividad que «contribuye a tener una actitud más abierta y tolerante», que es «una actividad emocionante y estimulante», que «ayuda a comprender el mundo que nos rodea» y «nos hace más felices». Las mujeres perciben la lectura en mayor medida que los hombres como una actividad «emocionante y estimulante y que te hace más feliz». Mientras que hay una mayor proporción de hombres que de mujeres que opinan que hay otras actividades de ocio más entretenidas que leer o, que para tener cultura no hace falta leer libros.

Menos optimistas son los datos en cuanto a la asistencia a bibliotecas o bibliobús. Estos descienden ligeramente con respecto al Barómetro de 2017. El 31,2 % de los entrevistados acudieron a una biblioteca o bibliobús en el último año. La mayoría de los usuarios acudieron de manera ocasional, sólo el 27,4 % de los usuarios acude de manera frecuente. La valoración que hace el conjunto de los españoles del servicio bibliotecario es muy alto, le otorgan una nota media de 8,1, un notable alto. Sin embargo, la opinión de los valencianos hacia sus bibliotecas no es tan optimista y se sitúa a la cola nacional. Le dan una nota de 7,9, al mismo nivel que las bibliotecas gallegas y solo por encima de las baleares (7,8).

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