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Entrevista

"El Superman de hoy no sería ni blanco ni heterosexual"

Jon Bogdanove es uno de los invitados estrella estos días en la Héroes Comic Con de València.

Jon Bogdanove (Albany, EE UU, 1953), ayer, en la Heroes Comic Con de València. german caballero

Power Pack, Superman, Steel, Batman, X-Terminators... Todos estos héroes han salido del lápiz de Jon Bogdanove, una de las piezas clave del tebeo norteamericano. Es conocido por ser uno de los creadores de La muerte de Superman (DC Cómics), la serie de cómics que acabó con la vida -aunque de manera temporal- de este ídolo. La historia conmocionó a los aficionados del tebeo, y Superman acabó siendo ensalzado como un mito dentro de la industria, al igual que Bogdanove.

A pesar que se cumplen 27 años de «La muerte de Superman», la historia sigue emocionando al público y generando dudas entre los aficionados. ¿Por qué?

R Es una buena pregunta. Muchas veces me he preguntado por qué la serie tuvo tanto éxito, pero nunca me he preguntado por qué sigue siendo popular. Me gusta pensar que es porque hicimos un buen trabajo. Creamos La muerte de Superman de manera colaborativa. Fuimos un equipo muy apasionado que decidió crear una historia de manera trasversal con tal de cumplir un reto: expresar por qué Superman era importante. Cuando la serie de cómics salió al mercado -en 1992-, los héroes de esa época tenían un lado oscuro. La venganza y la distopía formaban parte de sus aventuras. Superman, en cambio, era altruista y compasivo. Representaba valores demasiado buenos como para ser tomados en serio. Así que pensamos que lo que podíamos hacer para que el público valorara este personaje era quitárselo. Es decir, matarlo.

Una decisión bastante drástica.

Sí, y exitosa. La prueba es que ha tenido multitud de reediciones. Tras su muerte, todos querían que volviera. Pensaron: «¡Madre mía, está muerto!». Los creadores siempre pensamos que estábamos matando a un héroe que simbolizaba una era. Representaba la manera de vivir estadounidense. Matar a Superman simbolizaba matar el sueño americano. Se había acabado. No existía. En su lugar, solo quedaba venganza y distopía. Superman es muy interesante desde el punto de vista sociológico. La muerte de Superman marcó el final de la «Era USA», sin lugar a dudas.

Luego volvió a la vida.

Sí. Su regreso simbolizaba el inicio de una nueva generación de héroes. Los millennials tienen que empezar un nuevo ciclo. Es indudable que la nueva etapa estará influenciada por el pasado, pero en general, supone comenzar desde cero. El universo del cómic será más diverso, mejorado y universal con estos nuevos profesionales.

Si Superman hubiera sido creado hoy en día, ¿sería tal y como lo conocemos?

Sí, pero si hubiera sido creado hoy no sería un hombre blanco heterosexual. Sería una mujer. Y probablemente sería de otra etnia. Aunque creo que el impulso que llevó a crear Superman sería el mismo, ya que continuamos deseando salvar el mundo del mal. Todavía queremos cambiar las cosas a golpe de puño. En los tebeos, Superman hace de escudo humano para salvar a personas de desgracias. La bondad todavía forma parte de este mundo.

¿De modo que seguimos teniendo el mismo concepto de héroe?

Sí, porque todavía somos buenos.

¿Afecta más el contexto social a la hora de crear un personaje en la actualidad?

No. El tiempo histórico siempre fue importante para el mundo del cómic. Tenga en cuenta que trabajamos para el público. Todos los personajes, historias, trazos... son una reacción a lo que ocurre en la sociedad. Somos producto de nuestro tiempo. Siempre se cuentan mitos que corresponden a los valores de cada época. Ahora, hacen falta nuevas voces que cuenten su propia era.

Lleva más de 30 años en el mundo del cómic. Está acostumbrado a venir a certámenes como la Héroes Comic Con de València. ¿Este tipo de convenciones ha cambiado con los años? ¿Siguen siendo aquellos grandes encuentros con el público con ese tinte nostálgico?

Le diría que sí. Aunque debo corregirle: llevo más de 30 años porque cuando era un chaval también venía a las convenciones (ríe). Ahora son más grandes, y tienen cosplayers (ríe). Ahora en serio, la experiencia es la misma. Cuando eres un fan que vives inmerso en las historias de estos héroes y vienes aquí, te das cuenta de que no estás solo. Es una sensación magnífica.

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