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Entrevista

Raphael: "Nunca estoy contento con lo que hago, siempre pienso que puedo estar mejor"

«Antes se hacían canciones muy buenas. Pero no voy a compararlas con las de ahora, no tengo por qué»

Raphael: "Nunca estoy contento con lo que hago, siempre pienso que puedo estar mejor"

Hace ya casi 57 años que «el cantante abundante que necesitaba la España de la abundancia» (así lo definió en 1971 Vázquez Montalbán) ganó el Festival de Benidorm e inició una carrera musical a la que -en cuestión de éxito y resistencia-, muy pocos artistas en Europa aguantarían la mirada. En los últimos tiempos Raphael (que hoy cumple 76 años) ha intentando rejuvenecer su inconfundible estilo trabajando con músicos bastante más jóvenes que él e incluso actuando en algún que otro festival «indie». «Me quedan muchas cosas por hacer, y mejor que las que he hecho -asegura en entrevista telefónica con Levante-EMV-, porque siempre intento hacer lo mejor».

P Cuatro días seguidos actuando en el Palau de les Arts es una apuesta importante.

R Bueno, es que ciudades como València lo merecen, ¿no?

P Sin duda. Pero el pasado septiembre en la plaza de toros se quedó lejos de llenar. ¿No corre un riesgo ahora?

R No, normalmente no corro riesgos. Aquel día estaría lloviendo, yo qué sé.

P Bueno, o fue un mal día. No todo va a salirle bien.

R No, no, estaría lloviendo. Porque yo me acuerdo que el año pasado en septiembre hubo muchas tormentas. Algún incidente.

P En ese concierto vino con una banda que por momentos parecía de rock duro. Ahora viene con una orquesta sinfónica.

R «Resinphónica». Eso quiere decir que está mezclada la música sinfónica con la electrónica.

P A estas alturas de su carrera, reinventarse así es una necesidad o un divertimento?

R Es una obligación.

P ¿Por qué?

R Porque siempre hay que andar para adelante, no para atrás.

P Muchos artistas con menos carrera que usted hace años que hacen siempre lo mismo.

R Cuanta más altura se tenga, más obligación tienes de ir para adelante. Si no, quédate en casa.

P ¿Pero la obligación es con usted mismo o con el público?

R No, no, la obligación es primeramente conmigo mismo y con el público al mismo tiempo.

P ¿Cuando hace este tipo de experimentos es en busca de mercados nuevos y oyentes más jóvenes?

R No, porque los mercados nuevos yo los tengo desde hace muchos años. Indudablemente a mí van a verme cinco generaciones seguidas, así que eso lo tengo desde hace tiempo.

P ¿Es usted ahora más arriesgado que cuando empezó a cantar en los años 60?

R Yo siempre me he arriesgado. No me quite méritos.

P No hombre, pero a lo mejor en sus inicios tuvo otros méritos y no tanto el del riesgo.

R Nunca estoy contento con lo que hago, siempre pienso que las cosas que hago pueden estar aún mejor y que yo puedo estar mejor. Eso es lo que trato siempre, y por eso el público me quiere y va a verme, porque sabe que nunca va a ver lo mismo.

P Vivir con esa autoexigencia durante 60 años debe ser agotador.

R Es muy divertido. No tengo tiempo para aburrirme.

P Con tanto tiempo experimentando y actuando por el mundo, ¿la familia le echa de menos?

R Hombre, ten en cuenta que de Madrid a València hay hora y media de tren.

P Pero supongo que cuando prepara un disco o una gira de esta magnitud, usted pasará muchas horas en el estudio.

R Claro, y sobre todo que el último disco lo he grabado en Londres. Al final, si hay buena voluntad, hay tiempo para todo para que todo salga bien. Y mi familia a mí me ayuda muchísimo, tanto mi mujer como mis hijos.

P El disco está producido por Lucas Vidal, que es un compositor muy joven. ¿Cómo elige a sus colaboradores? ¿Por instinto o le aconseja alguien?

R Todas estas cosas son por olfato, que también es muy importante. Cuando me presentaron a Lucas decidí que él iba a ser el que iba a hacer el disco. Son cosas que las palpo, las siento, y hasta ahora no me he equivocado. Espero seguir la buena racha.

P ¿Nunca le ha fallado ese olfato?

R Hombre, alguna vez, sí. No soy infalible, pero las menos veces. Lo que cuenta es las veces que se ha acertado.

P ¿Le da mucha rabia cuando algo falla?

R No, cuando algo falla es solo un incidente. Es como cuando llueve. En 60 años de carrera es muy complicado que algo no falle alguna vez.

P El otro día estuve en una fiesta y uno de los momentos álgidos fue cuando el DJ pinchó «Mi gran noche».

R Claro.

P ¿Qué mimbres ha de tener una canción para mantenerse tan lozana 50 años después?

R Antes se hacían canciones muy buenas (ríe).

P ¿Mejores que las de ahora?

R No quiero comparar, no tengo por qué.

P En este último disco sí ha recuperado muchas antiguas canciones.

R Sí, porque las tenían que pasar por el filtro «resinphónico».

P Pero son canciones que ya estaban muy bien cuando las estrenó. ¿Por qué era necesario darle esta vestimenta «resinphónica»?

R Porque así demuestro que, cuando la canción es buena, pasa todos los filtros.

P Incluso el más electrónico, como la nueva versión de «Mi gran noche» remezclada por Joe Crepúsculo. ¿Había escuchado antes a Joe Crepúsculo?

R No lo conocía, me lo ha aportado mi hijo Manuel, que colabora mucho conmigo.

P Joe es más «indie» que otros colaboradores recientes suyos como Dani Martín, David Cantero o Mikel Izal.

R No te metas con ningún colaborador mío, que la tenemos.

P No hombre, simplemente digo que la apuesta por Joe es incluso más arriesgada que con los otros.

R Mira, aquí el único indie indie soy yo. Yo soy totalmente independiente, desde que empecé mi carrera. Y he tenido buenos apoyos porque al ser independiente puedo elegir a quién quiera, nadie me puede decir lo que tengo que hacer.

P ¿Ser independiente es lo mejor que le puede pasar a un músico?

R Sí, y a cualquier persona y en cualquier oficio. Cuando uno hace lo que quiere, como quiere y cuando quiere, es un hombre libre y feliz. Lo malo es que te manden. Yo tengo mánager, y a mi hijo Manuel, que procuran que siempre vaya por el buen camino.

P Es buen consejero su hijo?

R Muy bueno. Me conoce muy bien porque somos iguales.

P ¿Le hubiera gustado que hubiera sido cantante como usted?

R Pues no lo sé, porque mis hijos son libres para hacer lo que quieran hacer.

P Un artista como usted con un disco de uranio (fue el primero en recibirlo por vender 50 millones de copias de un recopilatorio) echará de menos las tiendas de discos llenas de gente. ¿Cómo se lleva con estos tiempos de música gratis?

R Está bien. Lo bueno de la música es que tiene millones de caminos y es fantástico poder recorrerlos todos.

P ¿Funciona igual el «RESinphónico» en directo que el «Sinphónico» que grabó hace cuatro años?

R Yo te diría que este funciona incluso mejor, porque en directo tiene la presencia, mía y de todos.

P Mi canción preferida de Raphael es «Estuve enamorado». Me parece uno de los mejores temas del pop español de los 60...

R Claro.

P ¿Usted tiene alguna canción preferida en su repertorio?

R Yo no debo tener preferidas porque todas son como hijos míos y a mis hijos los quiero a todos por igual.

P Pero siempre hay algún hijo con el que te lo pasas o conectas mejor.

R Ya, pero elegir una es muy complicado cuando tienes una trayectoria tan enorme. Si me dijeras las 25 que más me gustan, te podría contestar. Pero una, con un repertorio de tantos años y tantos éxitos, es imposible.

P ¿Y alguna a la que le haya cogido manía?

R Yo tengo una costumbre, que es que cuando yo me canso de alguna canción, la quito de mi repertorio. Y luego a los tres o cuatro meses la vuelvo a poner porque la echo de menos.

P El disco «RESinphónico» suena muy épico, parece una banda sonora. ¿Le gustaría frecuentar el cine más a menudo, como lo hacía en los 60?

R Lo malo es el tiempo. Pero yo siempre estoy conectado con el mundo del cine y siempre al habla para que, siempre que yo pueda y haya un guión que sea interesante para mí... Yo nunca me he ido del cine, acaban de darme el Premio Platino de Cine Iberoamericano, que iré a recogerlo ahora y cuando vaya a València iré con el premio.

P En aquellas películas de los 60 usted siempre representaba personajes románticos y un tanto atormentados, pero en la última, la de Álex de la Iglesia («Mi gran noche»), hizo de malvado la mar de bien. Sospecho que se lo pasó mejor en esta.

R Claro. Yo donde mejor me lo he pasado fue haciendo el musical de «Doctor Jeckyll y Mr. Hyde».

P Aquello fue un derroche, en todos los sentidos.

R Sí, pero disfruté mucho y fue un gran éxito.

P Pocos músico se permiten económicamente hacer espectáculos como aquel o este que va a hacer en Les Arts, con orquesta «resinphónica» y durante cuatro días seguidos.

R Pero yo lo hago porque el público se lo merece.

P Y por ganar algo de dinero también, ¿no?

R Hombre claro, si no me quedara algo para mí no lo haría.

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