Las polémicas y discusiones culinarias están a la orden del día. ¿La tortilla con o sin cebolla? ¿La pizza con o sin piña? ¿Y la paella? ¿Con o sin limón? Y para discutir no parece que haya mejor espacio que las redes sociales. La última entrega de «MasterChef», emitida la noche del martes en La 1 de RTVE, estuvo marcada por la polémica. Los concursantes se enfrentaron a la preparación de un plato con pescado y el aspirante valenciano Marcos decidió optar por el plato -con mayúsculas- valenciano: una paella.

El concursante valenciano preparó el plato más típico de su tierra con amor y dedicación. La polémica llegó cuando Marcos enseñó su propuesta al jurado del concurso. El catalán y estrella Michelín Jordi Cruz se ensañó con él, acompañado por Pepe Rodríguez, y criticó que el valenciano hubiese incorporado el limón a su presentación. Cruz aseguró además que el valenciano se ponía «muy intensito» y no dudó en asegurar que le parecía «ridículo» que el limón estuviese en el plato.

Marcos se defendió diciendo que acostumbra a preparárselo a su mujer y que a ella le encanta. Jordi Cruz fue más allá y se colocó el limón en la cabeza, un gesto que muchos han interpretado como una humillación al concursante y a la paella valenciana.

La polémica surgió en las redes sociales, donde los espectadores apoyaban o criticaban la decisión de Marcos de incorporar el cítrico elemento. Entre los apoyos al aspirante a MasterChef, algunos seguidores escribían: «Perdonad, chefs, pero en Alicante y Valencia muchas veces te ponen limón. Hay gente que le echa limón. A veces os pasáis». «Pues a mí una paella sin limón... no me la como!», decía otra usuaria de las redes sociales. Pero no todo fueron palabras de respaldo para el concursante. «Que quede bien claro, la paella sin limón», defendía un espectador.

Cuestión de gustos

Desde el Restaurante Levante de Benissanó y cuyos fogones están reconocidos entre los mejores de la Comunitat Valenciana, aseguran que «si una paella está bien hecha, el limón está de más». Desde el establecimiento admiten que, pese a considerar que el limón se utiliza para tapar un mal resultado en las cocinas, si un cliente reclama un limón se lo ofrecen, aunque «dejamos que prueben el sabor auténtico de la paella primero», exponen. «Es una cuestión del comensal», apuntan desde el restaurante, aunque «un cocinero no pondría limón si considera que ha hecho la paella buena», concluyen.

Mientras tanto, «MasterChef 7» sigue adelante y con él las expulsiones. En esta ocasión, Carmen ha sido quien ha dicho adiós a su aventura ante los fogones. La extremeña no pudo superar la prueba de eliminación. La salida de Carmen se vio contrarrestada con la llegada de Samira. La joven ha entrado en «MasterChef7» tras el abandono de Josecho, tras sufrir una fractura del tobillo.