Una pieza musical que rastrea los sentimientos de los exiliados. La acción de "Les veus de la frontera", la primera cantata de Manuel Molins, transcurre en un campo de refugiados donde aparecen ocho historias protagonizadas por gentes arrancadas de sus casas. Ese limbo al margen de la legalidad, y también de la humanidad, ha llevado a Molins a realizar "un grito contra todo eso, porque el arte también sirve para denunciar y mejorar la convivencia en la diversidad".

Manuel Molins, Premio de Honor las Artes Escénicas de la Generalitat en 2018, reivindica la labor humanitaria de las ONG para que sigan salvado vidas. Todos los beneficios de la obra irán destinados a las ONG's Opens Arms, Cruz Roja y CEAR (Comisión española de ayuda al refugiado). La obra se estrena el 23 de mayo en el Palau de la Música y está producida por Mediterráneo Media Entertainment, que también está preparando un documental sobre los refugiados a partir de la obra del dramaturgo valenciano.

Escrita y dirigida por Manuel Molins, "Les veus de la frontera", cuenta con música de Arcadi Valiente interpretada por el Orfeó Valencià dirigido por Josep Lluís Valldecabres, con la participación de los solistas Vicent Antequera (barítono), Miguel A. Ariza (barítono), Óscar Navarré (tenor), Tere Núñez (mezzo), Elma Sambeat (soprano), Joan Valldecabres (barítono) y Amparo Zafra (mezzo).

Los actores Esther Valles, Luis Meliá, Abel Soriano y Helena de Luis interpretan a varios de los personajes de la obra. Jesus Debón (piano de continuidad), Joan E. Broseta (Oboé), Luís Martínez (Violonchelo), y el propio Arcadi Valiente (Piano) serán los responsables de colorear la cantata.

Origen

"Les veus de la frontera" nace hace tres años, cuando Molins acude a la demanda de un compañero para realizar una composición sobre refugiados para sus alumnos. La obra se estrena en Cullera y luego se edita en Pruna Llibres.

Molins repasa las biografías rotas de un hijo y la madre, de un músico, del intelectual, la niña que pierde su familia, o el militar que debe custodiar a los refugiados el día de su boda. «Historias múltiples y diversas -asegura-, pero sin jugar a buenos y malos, porque en todos los sitios hay víctimas». Testigos donde se intuye la procedencia geográfica y su destino europeo como exiliados, «aunque todos los refugiados provienen de la guerra o de la pobreza», matiza el autor de "Les veus de la frontera".

La primera cantata de Manuel Molins cuenta con la colaboración especial de La Nova Muixeranga d'Algemesí al final de la obra. Donde mientras se levanta el castillo humano se escucha «Humans, només humans». La compasión es el termómetro de la evolución humana. "¿Renunciaremos a ser más y más humanos", se pregunta Molins.