Conforman el dúo más magnético de la música clásica. Nacidas en Bayona en el seno de una familia de origen francés, son famosas por su increíble sincronía a los teclados. Sobre el escenario, Marielle y Katia Labèque son como un espejo, aunque con destellos disonantes. Cada una expresa su propia personalidad bajo los focos. Su virtuosismo ha enganchado a medio mundo y se las confunde a menudo con las celebridades del mundo del cine y la música. Aunque no es de extrañar. Tocaron en la boda de Madonna, son íntimas amigas de Sting, viven en el palacio de los Borja en Roma y han aparecido más de una vez en la revista Hola.

Vuelven a València después de dos años. Han cambiado el Palau de la Música por el TEM.

Sí. Teníamos muchas ganas de volver a València. Nos encanta tocar en España. Hoy actuamos en Úbeda (Jaén) y mañana llegaremos a València para pasar un buen rato con el público.

Interpretarán obras de Philip Glass, Maurice Ravel y Leonard Bernstein. ¿Qué tienen en común estos compositores?

Los tres forman parte de nuestras vidas. Interpretaremos el primer arreglo para dos pianos que existe de West Side Story, de Leonard Bernstein. La composición cuenta con el visto bueno de Irwin Kostal, el arreglista del compositor estadounidense. Por otro lado, interpretaremos un monográfico de Glass con The Chase (Orphée and the Princess) y Stoke's Duet, dos piezas estrenadas recientemente. La primera esta centrada en el mito de Orfeo y su dicotomía entre la vida y la muerte, y la segunda forma parte de la banda sonora de la película Stoker (2013).

Glass ha dicho de ustedes que son las «mayores promotoras» de la música contemporánea en la actualidad.

Tenemos una relación muy estrecha con Philip. Nos vio actuando en Los Angeles y en seguida supimos que teníamos que trabajar juntos. De hecho, actualmente habrá noticias relacionadas con este compositor.

Parece que no es el único que ha querido trabajar con ustedes. En París actuaron junto a Thom Yorke (Radiohead) y acaban de publicar un álbum junto a Bryce Dessner (The National), «El Chan».

Sí, junto a Thome interpretamos Don't Fear The Light, una composición para dos pianos acompañados de un sintetizador. Por otro lado, Dessner es un compositor muy talentoso y emocional. Es de la escuela de Glass.

¿Qué significa «El Chan» en vuestra trayectoria? Es muy diferente a lo que han grabado con anterioridad...

Sí. Nos hemos dejado guiar por el talento creativo de Dessner. El disco está inspirado en la leyenda de un guardián espiritual, «El Chan», que se encuentra en una laguna cercana a la casa de director mexicano Alejandro González Iñárritu. De hecho, el cineasta es el autor de la portada del álbum. Dessner hizo la banda sonora de El renacido (2017).

Tienen un repertorio muy variado, que va de lo más clásico a lo más contemporáneo. ¿Se sienten más cómodas en alguno de estos repertorios?

Para nosotras todo es música. Le podemos tocar una obra minimalista o jazzística y después interpretar una obra de Ravel con el mismo entusiasmo y concentración.

Ravel también estará en el repertorio del TEM.

Maurice Ravel nunca ha desaparecido de nuestras vidas. Sus obras nos recuerdan a mi madre, la que nos inició en la música. El piano es un instrumento que te permite soñar despierto y, junto a las composiciones de Ravel, te transportan a un mundo mágico.

Llevan toda una vida tocando juntas, más de 40 años. ¿Pensaban ustedes cuando eran niñas que iban hacer un dúo en su carrera musical? ¿Estaba planeado?

No estaba planeado. Hemos tenido mucha suerte de haber podido tocar juntas. Otros instrumentistas suelen tocar acompañados, pero la vida del pianista es más dura, siempre solitaria. Nos necesitamos, incluso vivimos juntas.