De conseller a mecenas.
No tanto.
Ha donado una colección importante a la Academia de Bellas Artes.
Es una colección discreta y la donación responde más a que soy partidario de compartir. Mecenas no soy, pero tengo mucha experiencia en la vida cultural.
¿Por qué a la Academia de San Carlos?
La Academia se montó a base de donaciones. El Prado, el Reina Sofía y los grandes museos se han hecho a base de donaciones.
Elige como título para la conferencia de hoy «El imposible» de la Ley de Mecenazgo.
Una Ley de Mecenazgo es un imposible.
¿Por qué?
Desde la Transición todos los partidos políticos lo recogen en sus programas pero nunca se pone en practica. El mecenazgo se rige por una ley de 2002, pero venía de una antigua legislación. La situación no está mal, pero no estamos a nivel de Francia, ni Alemania, ni Reino Unido, ni mucho menos de Estados Unido, donde hay bonificaciones del cien por cien.
¿El motivo?
Una hacienda depredadora, ya se llame Montoro o Montero,que desconfía del sector privado. También hay un perjuicio nacional hacia el rico que hace mecenazgo.
¿Las fundaciones de los bancos están bien vistas, pero no los particulares?
Se sospecha de quien ha hecho fortuna, del que ha triunfado en la vida privada.
Sin mecenas no hubiera existido a Sorolla.
En principio el mecenazgo era cosa de reyes y la Iglesia, pero tras el Renacimiento empiezan los gremios y los particulares.
¿Cuál es la solución para un Ley de Mecenazgo consensuada?
El estado de bienestar requiere cada vez más fondos para la discapacidad, la tercera edad. Eso va detrayendo al mundo de la cultura, de la ciencia y la investigación. Debemos buscar una colaboración público-privada, y que los individuos, no solo las empresas, hagan mecenazgo.
¿Aunque la mayoría de las veces es para pagar menos a Hacienda?
Eso es falso. Amancio Ortega ha pagado los últimos años más de 12.000 millones de euros en impuestos. En los programas del Metropolitan Opera House te encuentras viente páginas dedicadas a los mecenas, desde lo que dan 50 dólares a los que dan 14 millones.
El mecenazgo necesita de una sociedad industrial, que no es el caso valenciano.
Nuestro nivel de desarrollo no se corresponde con nuestros vecinos. Francia bonifica el cien por cien, tanto las sociedades como individuos. Alemania y el Reino Unido igual. Estado Unidos ni le cuento.
¿Cómo bonifica España?
En 35 las empresas y 25 particulares. Las microdonaciones, que las ha autorizado el Prado y el Thyssen para comprar alguna obra, se bonifican al 75% hasta 150 euros, eso es ridículo. Conozco empresarios importantísimos del mundo del petroleo en España que donan al Metropolitan y aquí cuando dan al Real no quieren aparecer.
¿Y eso?
Porque hay una estigmatización del rico. Encontramos casos de gente muy rica que hace mecenazgo con dinero público, que piden subvenciones a las administraciones públicas para hacer mecenazgo.
¿Por qué los países árabes están comprando arte?
No compran arte, simplemente imágenes.
Hace 24 años fue el primer conseller de Cultura de Zaplana.
Hemos mejorado en autoestima y señas de identidad. Soy un profundo defensor del Estado de las Autonomías.
¿Satisfecho del paso por el Consell?
Fue una experiencia muy buena. Intensa porque fue el primer gobierno del PP, había muchas presiones y se ponían en cuestión temas de la lengua.
En el tema de la lengua aguantó la presión.
Fue una manipulación de los que tenían miedo al Estado de las Autonomías y la emprendieron aquí. Eso se terminó. Por eso estoy muy apenado de la muerte de Carme Miquel, ha sido una gran defensora del valenciano de forma muy elegante. Me gustaría que el Ayuntamiento de València le dedicará una calle.
¿Mantiene relación con el mundo de la cultura valenciana?
No es una relación orgánica.
¿Cómo lo ve?
No es comparable el caso de València y Cataluña. Aquí nadie tiene un sentido independentista.
¿Cree que los gestores valencianos tienen mentalidad cosmopolita?
No. València es una de las ciudades más elegidas por los estudiantes de Erasmus, más que Barcelona.
¿Qué haría en el Museo de Bellas Artes?
Lo primero una ley del museo, igual que la tiene el Prado, el Reina Sofía y el Thyssen para que se puede autogestionar, dejar la tutela del Estado y hacer un museo autónomo apoyado por la institución cultural más importante de la Comunitat Valenciana, la Real Academia de San Carlos.
¿Por qué no se ha hecho?
Por falta de ambición.
¿Es partidario de una conselleria propia de cultura?
Es igual que sean blancos o negros con tal que cacen ratones. La cultura tiene que ver mucho con la educación.
¿Balance de los cuatro años del gobierno botánico?
Me han parecido muy locales. No se ha conseguido mejorar la financiación, y toda esa dialéctica no ha servido para nada. Han tenido poco peso en el Estado. Nos queda mucho por reivindicar.
