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La Casa de Papel: Un cabecera con sello valenciano

Fina Martínez, de Dø Postproduction, es la responsable de la introducción y los efectos digitales (tiros, sangre, explosiones y estética) de la serie

La Casa de Papel: Un cabecera con sello valenciano

Las cabeceras de las ficciones televisivas aprisionan la personalidad del producto que estamos a punto de ver al más alto nivel artístico. También conocidas como secuencias de apertura o introducción, estas son, en resumidas cuentas, la carta de presentación del amplio rompecabezas audiovisual en su larga cadena de creación y perfección. Y de su belleza, de su gusto y deleite inicial al espectador, reside buena parte del éxito o fracaso de su trabajo.

Esta es la responsabilidad, que también éxito, que ha cosechado la alicantina Fina Martínez al encargarse, junto a su equipo de Dø posproduction, de la cabecera de La casa de papel, la ficción española de Netflix que bate todos los récords de visualizaciones (van por los 40 millones solo en la emisión de su tercera temporada) y reconocimientos internacionales.

La postproductora creada por Javier Urosas, Alejandro Rius, Pablo Zorrilla y la alicantina Fina Martínez no solo se ha encargado de esta tercera temporada, sino que también lo hizo con la versión anterior de las dos primeras temporadas, las del auténtico despegue y difusión, con una próxima cuarta temporada de La casa de papel con la que proseguirán. «La oportunidad surge con uno de nuestros colaboradores habituales, Migue Amoedo, director de Fotografía de La casa de papel, quien nos puso en contacto con Vancouver Media. Presentamos una propuesta y funcionó. De ahí hicimos la intro de la primera y segunda temporada. Y la serie ha tenido tanto éxito que hemos seguido trabajando con una nueva cabecera para la tercera y cuarta temporada. Esta última tiene el mismo estilo pero en vez de la Casa de la Moneda y Timbre ahora aparece el edificio del Banco de España siguiendo la misma estética creativa», comenta Fina Martínez, al tiempo que agrega que «respecto a los efectos especiales hay un salto de espectacularidad en los VFX en esta tercera temporada porque al entrar Netflix hemos podido tener más presupuesto para ejecutarla».

«La cabecera tiene que transmitirte e involucrarte en el universo de la serie. Es la pieza que se repite en todos los capítulos y, en su proceso, se trabaja con los directores y productores ejecutivos siempre con varias opciones creativas inicialmente. Se reúne el equipo de postproducción, se hace lectura del guión, se involucra a todos con la serie hasta que se plantea una propuesta», explica Fina Martínez sobre esta cadena creativa en el que se ven involucradas numerosas partes.

«En nuestro caso todo el planteamiento fue en 3D. En la primera temporada para la cabecera en 3D trabajaron unas 12 personas, pero en la tercera hemos sido un equipo de 30. Trabajar en 3D es muy complicado y hay que tener siempre muy claro todos los planos porque cualquier modificación es mucho trabajo», señala.

Además de la intro, Fina Martínez ha estado al frente junto a sus compañeros de los denominados VFX -efectos digitales- de La casa de papel, es decir, de todo lo que implica tiros, sangre, explosiones o limpiezas de imagen, cuidando al milímetro, plano a plano, píxel a píxel, una ficción que ha dado la vuelta al mundo.

«Álex Pina (creador de La casa de papel) nos ha dado la oportunidad a una nueva generación que tenemos una visión más internacional, que nos hemos educado con series norteamericanas. Intuíamos que esta ficción podía ser un antes y un después, por el cambio de generación técnico que también ha supuesto, y eso se nota en la factura de imagen de la serie», indica Fina Martínez, quien también considera clave la originalidad de la trama con el atraco así como la empatía que generan los distintos personajes de La casa de papel para su éxito.

«Antes digamos que habían cinco televisiones tradicionales y ahora mismo hay ventanas que dan más oportunidades. Se necesita contenido para llenar todas esas parrillas porque de alguna manera estamos en la edad del contenido. Mira de hecho las tendencias publicitarias. No paran de rodar historias porque necesitan contenido. Estamos en un momento dulce aunque espero que no nos explote en la cara. Es una oportunidad para grandes y pequeñas empresas», reflexiona Fina Martínez.

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