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Exposición

Línea directa entre Sevilla y Sempere

Los valencianos protagonizan una muestra conjunta en Madrid con obras poco expuestas

A la izquierda, una de las obras de Sempere expuestas. A la derecha, pieza de Soledad Sevilla. levante-emv

A Eusebio Sempere (Onil, 1923-1985) y a Soledad Sevilla (València, 1944) les une «su compromiso radical con la geometría y la luz, la voluntad constructiva y el sentimiento poético, el equilibrio entre la estructura y el lirismo y, sobre todo, la elección de la línea, el ritmo vibrante y la serenidad evocadora de eternidad e infinitud».

Así lo aseguran desde la galería Fernández-Braso de Madrid donde hasta el próximo 8 de noviembre se puede visitar «Sempere/Soledad Sevilla. Líneas paralelas», una exposición de unas 40 obras que gira entorno a «la elección de la línea, el ritmo vibrante y la serenidad evocadora de eternidad e infinitud», en palabras de Rocío de la Villa, historiadora, comisaria y crítica de arte, y autora de uno de los textos del catálogo editado con motivo de la muestra.

Las obras de Sempere seleccionadas para esta exhibición -unas inéditas, otras sin exponerse tiempo al público-, son gouaches sobre papel y sobre tabla, fechados entre 1954 y 1979 «y buenos ejemplos de la calidad y diversidad de lenguajes e intereses que exploró el artista, de los más analíticos a los más poéticos y espirituales», sostienen desde la galería madrileña. Arturo Sagastibelza, «profundo» conocedor de la obra de Sempere y «coleccionista apasionado» de sus obras, asegura que «en su arte no hay nada desasosegante, abrumador, nada que nos recuerde lo doloroso de nuestra humana condición. Todo es leve, sutil, etéreo, ingrávido».

Esa espiritualidad de Sempere es parte de lo que Sevilla reivindica del artista de Onil. «Se conocieron y admiraron a pesar de la diferencia generacional, conceptual y estética que se aprecia al contemplar la obra de ambos artistas. «Sevilla recuerda aquellos años de finales de 1960 y principios de los 70 en los que compartieron ideales (Centro de Cálculo de la Universidad Complutense de Madrid) junto a otros artistas como Alexanco, Elena Asins, Gerardo Delgado, Eduardo Sanz o Yturralde», explican desde la galería. «Hoy vuelvo a reunirme con Sempere y reescribe mi memoria. Eusebio siempre sorprendente, siempre vigente, siempre en continua aspiración de lo intemporal», sostiene Sevilla.

La Premio Nacional valenciana ha seleccionado personalmente sus obras, que abarcan su periodo geométrico de 1969 a 1984 y conforman casi el único material que sobrevivió a un incendio en el estudio de la artista y que acabó con la mayoría de sus obras sobre tela de esa época.

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