La gala de los premios literarios «Ciutat d'Alzira» cabalgó el viernes entre el cierre de la campaña electoral, que mermó notablemente la presencia de altos cargos -el presidente de las Corts, Enric Morera, y el conseller de Cultura, Vicent Marzà, encabezaron la representación institucional-, y el inicio de la jornada de reflexión una vez superada la medianoche. La cita con las urnas sobrevoló por momentos la velada literaria, sin demasiadas alusiones de carácter político, aunque con intervenciones que vislumbraban cierta preocupación ante un posible avance de la extrema derecha y, más tangencialmente incluso, alguna referencia a la situación que se vive en Cataluña.
«Esperamos que la cultura sea luz en medio de la oscuridad (...) y que nos ayude a superar la oleada de populismo y de retroceso democrático. Esperamos que no se persiga a la gente por sus convicciones», señaló el editor de Bromera, Josep Gregori, promotor junto al Ayuntamiento de Alzira del certamen literario, en una breve intervención que giró en torno a la esperanza de que no se den pasos atrás y se mantenga la lucha por otros logros sociales.
Vicent Marzà reivindicó que los libros ayudan a las personas a pensar y ser más libres y echó mano de recursos literarios para, ya en la jornada de reflexión, no herir ninguna sensibilidad. En ese punto, recomendó la lectura de tres obras editadas por Bromera -«El finançament valencià», «El canvi climàtic a casa nostra» y «I tu, ets feminista?»- y de «Contra el fanatismo», de Amos Oz, mientras dejaba entrever que después nadie dejaría de salir de casa para «hacer uso de la llave que abre todos los cerrojos para ser más libres», en una clara alusión a la cita con las urnas
También el alcalde de Alzira, Diego Gómez, aludió a la incertidumbre que representa la jornada electoral de hoy, expresó su esperanza en que el pueblo «hable» y reivindicó la diversidad «cultural, social, ideológica, religiosa, lingüística y sexual» como forma de enriquecimiento de la sociedad. Gómez indicó que la Administración debe continuar trabajando «en defensa de nuestra cultura, que queremos mantener, proyectar y dignificar».
Cerca de 700 personas se dieron cita en la gala de entrega de premios que cerraba una nueva edición del certamen literario, que fue conducida por el humorista Eugeni Alemany . El ganador del premio de ensayo Mancomunitat de la Ribera Alta, Juli Capilla, fue de entre los escritores quien mostró un tono más reivindicativo y, tras realizar una defensa de «los libros, la lectura y la palabra» ya implícita en su obra, apeló a la libertad de expresión de las personas y los pueblos y al diálogo ya que, sin diálogo, dijo, se cae en el autoritarismo.
El director de la Uned Alzira-València, Alejandro Cerdá, también reivindicó la palabra, la lectura y, en particular, la poesía, frente al «déficit expresivo» de los nuevos sistemas de comunicación.
Ganadores
Los premiados de la 25.ª edición de los Ciutat d'Alzira han sido Vicent Usó en novela; Juli Capilla en ensayo; Joan Deusa en poesía; Carles Alberola en teatro; Rosa Maria Colom en narrativa juvenil; Francesc Gisber en narrativa infantil; y el ilustrador Canizales en álbum ilustrado. A esta edición se habían presentado cerca de 200 originales.
