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Homenaje

El espíritu Arena vuelve a València

Una fiesta y una promotora recuerdan y recuperan el legado de la sala que atrajo a la ciudad a varias de las mejores bandas de la historia

El espíritu Arena vuelve a València

De las cosas que le hacen falta a València (alguna hay) una de las que más deseo despierta entre los melómanos del lugar es una sala de conciertos con un aforo para más de mil espectadores, como la Riviera en Madrid o la Apolo en Barcelona. El caso es que, hasta no hace demasiado, València tuvo un lugar así. Primero se llamó Pachá, después Arena y tenía una especie de hermana pequeña llamada Garaje. Desde hace unos meses, y tras muchos años de abandono, el antiguo epicentro de la música en directo de la ciudad, es un supermercado. «Ya no puedo comprar feliz», cantaban The Clash.

El viernes 24 la sala 16 Toneladas acogerá «The Mission Party». La excusa es celebrar la vuelta a València en marzo de una de esas oscuras bandas británicas que se subieron al escenario de la discoteca de Benimaclet en los 80. Pero la verdadera intención es presentar un proyecto cuyo objetivo es montar fiestas que recuerden aquella época y conciertos de bandas que la sobrevivieron.

En esta primera cita de la promotora Arena Valencia Store-Garage actuarán Planet8, liderados por Oscar Briz, y pincharán varios de los DJ que pasaron por las cabinas de Pachá, Arena y Garaje entre 1983 y 1999: Luis Bonías, Toni el Gitano, JL Maestro, Luis Royo, Alberto Coll, Manolo Sánchez, José Francés, Paco Revolution y Paco Canya. «Es un pistoletazo de salida y, sobre todo, una conmemoración de mi amigo Napoleón Beltrán, que fue el gran gurú de la música en directo en la València de los 80 y los 90», sentencia Emilio Ruiz, programador durante años de Arena y Garaje e impulsor junto a Bonías del proyecto. Fallecido en 2018, «Napo» Beltrán fue el propietario principal de la sala y quien facilitó a base de bolsillo, contactos y confianza en un puñado de jóvenes enamorados del pop, que algunos de los grupos más punteros de la época, nombres que hoy aparecen en cualquier libro sobre la historia del rock o encabezando conciertos y festivales multitudinarios, actuaran en València.

«Cuando Pachá se inauguró a finales del 83 venían sobre todo muchos grupos nacionales -cuenta Emilio-. Los primeros fueron Alaska y Dinarama con Pedro Almodóvar y McNamara, y a partir de ahí Golpes Bajos, Gabinete, Siniestro, Radio Futura? Y luego grupos internacionales como OMD, Depeche Mode, Nina Hagen, Ultravox, Ian Dury, New Order, Marc Almond, Sade, Chameleons...». En 1987 la Pachá valenciana cambió su nombre y pasó a llamarse Arena Auditorium. «Habíamos estado por Londres y Napo quería algo que tuviera que ver con Wembley Arena. Con el cambio entró otro concepto de música y empezamos a traer a gente como Nick Cave, Ramones, Cramps... Y también empezamos a organizar conciertos fuera de la sala como Prince, Tina Turner o The Cure?».

Pachá-Arena se consolidaba como la gran sala de conciertos de la ciudad y en la parte alta del edificio abría Garaje, con José Ricardo Seguí -que estuvo un par de semanas en Londes buscandos ideas y contactos-, como primer programador. «Podrían tocar perfectamente Radio Futura en la parte de abajo y los Pixies en la de arriba -recuerda Emilio-. El único criterio para estar en un lugar u otro era la cantidad de gente que podían atraer».

València fue durante estos tiempos una de las capitales de la música en directo en España. Además de los que recuerda el antiguo programador, en Pachá-Arena-Garaje tocaron The Psychedelic Furs, Fresh for Lulu, Devo, Green on Red, Stray Cats, New Model Army, The Waterboys, Alan Parsons, Inmaculate Fools, Robert Plant, The Sisters of Mercy, The Cult, The The, Héroes del Silencio, Loquillo, Iggy Pop, Rammstein, The Damned, Simple Minds, Radiohead, B. B. King, Chuck Berry, Jerry Lee Lewis, The Communards, Pantera, Simply Red, Marilyn Manson, P. J. Harvey, David Byrne, John Cale, Love and Rockets, Manowar, Suede con Manic Street Preachers de teloneros? «De la época en la que estuve programando me quedo sobre todo con el concierto de los Pixies en Garaje y el de Kraftwerk en Arena. Era la primera vez que venían a València y lo hicieron con robots y todo -rememora Emilio-. Quizá la mayor decepción fue Iggy Pop, porque no hizo lo que esperábamos, pero lo arregló la segunda vez que vino».

También tiene marcada la actuación de Nico, que una semana antes de su muerte en Ibiza vino acompañada por Ari, el hijo que tuvo con Alain Delon, que le vendía las camisetas. O la de los Replacements: «En Nueva York llenaban pero aquí no vendimos ni 50 entradas. Así que se bajaron del escenario y empezaron a tocar entre el público. Fue inolvidable». Tampoco se olvida Emilio de los PiL comandados por John Lydon: «Estaba como una cabra. Nos lo llevamos a comer paella y se subía a la mesa, empezaba a hacer tonterías con las cigalas...».

Para el promotor, otro momento histórico, ya no para la ciudad, sino para la historia del rock en España fue el concierto organizado por Arena que el 2 de julio de 1992 ofreció Nirvana en la Plaza de Toros, con Teenage Fanclub de teloneros. Y también hubiera sido histórico el que iba a reunir en el mismo coso a The Pixies, Happy Mondays y The Farm. «El mismo día del concierto las luces se vinieron abajo y destrozaron el backline. Tuvimos que suspender y devolver las entradas. Era 1991 y lo habíamos bautizado como 'Valencia Festival'. Hubiera sido el primero de este tipo antes que Benicàssim».

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