Las cenizas de la escritora isabel-clara simó, fallecida el pasado 13 de enero en su casa de Barcelona a los 76 años, reposan desde ayer en el cementerio de Alcoi, su ciudad natal, donde se le rindió un sencillo y emotivo homenaje. El camposanto San Antonio Abad acogió el acto de despedida de la Medalla de Oro e Hija Predilecta de Alcoi, que consistió en un recorrido desde la puerta de la necrópolis hasta el cenotafio, donde se depositaron sus cenizas y se ofreció un recital con música de fragmentos de sus obras más destacadas. Hasta el cementerio se desplazaron, entre otros, una de las hijas de Isabel-Clara Simó, el conseller de Cultura, Vicent Marzà, y el alcalde de Alcoi, Antonio Francés.