Con su versión de «In the Ghetto», la canción que popularizó Elvis Presley en 1969, El Príncipe Gitano conquistó al público. Y no lo hizo por su voz o su deficiente inglés sino por su carisma y personalidad. Ayer, en la residencia de Guadalajara en la que residía desde hace diez años, el valenciano Enrique Vargas Castellón (su nombre real) fallecía a los 92 años víctima del coronavirus. Actor, cantante, bailarín y casi modelo, fue una de las figuras más emblemáticas de la rumba y de la zambra durante el siglo pasado.

Nacido en el barrio de Russafa, se crió en el seno de una familia gitana dedicada a la venta ambulante e hizo carrera artística en Madrid tras recorrer media España junto a ellos. Primo hermano de Sabicas, entre sus seis hermanos se cuentan además el guitarrista Juan José Castellón Vargas y, sobre todo, Dolores Vargas «La Terremoto», a quien acompañó en sus primeras canciones, como «Penas de la gorriona» o «Málaga bella».

A los 14 años debutó en el Teatro Calderón de Madrid en el mismo espectáculo que Lola Flores y muy poco después formó su primer espectáculo, Pinceladas, llegando a convertirse en una gran figura de la canción española en los años 50, pese a que su pasión real era el toreo.

Su compañía sirvió de plataforma de despegue para muchas otras figuras, como Rocío Jurado, Carmen Sevilla o Manolo Escobar. Se cuenta que fue precisamente en uno de esos espectáculos cuando Escobar escuchó de su boca por primera vez interpretar «El porompompero» y que, con su aquiescencia, lo terminaría incorporando a su propio repertorio. Una situación similar se repitió años después con «Tengo miedo», que terminó popularizando Rocío Jurado, y de nuevo con «Obí, Obá, cada día te quiero más». Como actor destacó con papeles como el de «Brindis al cielo» (1954) y «Españolear» (1969) y en la que sus personajes a menudo se presentaban como El Príncipe Gitano.

Fallece Mundstock de Les Luthiers

El argentino Marcos Mundstock, uno de los fundadores del grupo Les Luthiers, falleció ayer a los 77 años tras más de un año lidiando con un problema de salud irreversible.