Algemesí no tendrá semana taurina por primera vez en su historia. La asociación de cadafals decidió anoche suspender la Setmana de Bous, una de las ferias de novilladas más importantes que se celebran en España, a causa de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. La medida se comunicó a través de una nota de prensa y se hizo oficial después de que a principios de semana también se comunicara la suspensión de las fiestas de la Mare de Déu de la Salut, declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

Asimismo, en marzo, la suspensión de la subasta, el reparto de los cadafales entre las peñas y la elección de la junta ya dejaron en el aire la confección de la Setmana de Bous. De hecho, según fuentes consultadas, no había ninguna novillada apalabrada para realizar la feria a causa de la inestabilidad promovida por la pandemia.

Según explican en el comunicado, la celebración de la Semana Taurina conlleva una importante repercusión económica en la ciudad porque muchos sectores comerciales de Algemesí se benefician de esta feria taurina, un espectáculo que concentra 4.000 personas diarias durante 10 festejos. A ello hay que añadir las inversiones de empresas y trabajadores locales que llevan a cabo durante la Setmana de Bous tanto las propias peñas cadafaleras como la propia Comisión Taurina. De hecho, una de las propuestas de los organizadores durante el 2020 es llevar a cabo un estudio que refleje el impacto económico que supone para Algemesí la celebración de su semana taurina.

"A día de hoy, inmersos en esta situación de pandemia sanitaria, es impensable mover a miles de personas cada día durante diez días. Hemos esperado hasta el límite para conocer la situación y evaluar posibilidades. Ahora ya sabemos las limitaciones de distancia social que hacen imposible una fiestas tan multitudinarias y de la exigencia y el nivel que merece Algemesí", asegura el actual presidente de la Comisión Taurina, Alberto Fernández.

Asimismo, la plaza de toros de Algemesí es un caso único en la historia del toreo porque tiene una configuración rectangular y cada 9 de septiembre, los peñistas inician su bastimento, tal y como han aprendido de sus antepasados a base de madera, cuerdas y clavos como materias primas, en la Plaza Mayor de Algemesí, entre en el Ayuntamiento y la Iglesia. Según explican los vecinos de la Ribera, el sistema de construcción se estableció en 1943 y su conjunción se ha adaptado a las normativas de seguridad con el paso de los años. Pasados los días de montaje, los últimos diez días de septiembre acogen una feria taurina sin igual.