El tenor español Plácido Domingo cantará por última vez en la Ópera de Viena el próximo enero, según anunció ayer el director de este teatro, Bogdan Roscic, quien insistió en mantenerlo en el programa por no haber encontrado nada en el debate sobre los supuestos abusos sexuales que lo impida. «Yo no he encontrado nada en toda la discusión, y no soy el único, que justifique la prohibición de trabajar para Domingo», señaló Roscic.

El director indicó que si bien las acusaciones contra Domingo son bien conocidas, en su opinión se han formulado de una manera «dudosa, anónima y abstracta». El nuevo responsable de la Wiener Staatsoper indicó que para Domingo era muy importante poder despedirse del público vienés coincidiendo con su 80 cumpleaños el próximo 21 de enero. «Para era él era una gran deseo despedirse del público de Viena en su cumpleaños redondo», señaló Roscic.

Stefan Wollmann, jefe de comunicación del teatro, que Domingo ha comunicado a la Ópera de Viena que sus actuaciones en el Nabucco de Verdi los próximos 11, 14 y 19 de enero serán las últimas en ese escenario. Antes, el cantante protagonizará, el 9, 12, 15 y 18 de septiembre, un montaje del Simon Bocannegra de Verdi.

Domingo cantó por primera vez en la Ópera de Viena el 19 de mayo de 1967, cuando tenía 26 años, interpretando el papel de Don Carlos en la ópera del mismo nombre de Giuseppe Verdi. La Ópera de Viena le ha concedido los máximos honores y reconocimientos.

Por otro lado, el Teatro Bolshói de Moscú anunció ayer que no prescindirá del tenor en su programación. «Si hoy en día el Teatro Bolshói cuenta con una oportunidad de colaborar con este gran músico y complacer con esta interacción no solo a los espectadores sino a nosotros mismos, pues nunca lo rechazaremos», dijo Vladímir Urin, director del auditorio.