La presidenta del Palau de la Música, Glòria Tello ha convocado para mañana jueves al consejo de administración de este organismo autónomo a una sesión extraordinaria con un único punto: «dar cuenta de la denuncia presentada (...) por los recientes hechos acaecidos en el Departamento de Taquillas». O, lo que es lo mismo, por el robo de 5.000 euros que estaban guardados en el despacho del director del auditorio, Vicent Ros.

Así pues, Tello dará cuenta ante los grupos de la oposición representados en el consejo de administración, del robo sucedido en el Palau una semana después de que el suceso se hiciese público a través de los medios de comunicación, y casi un mes después de que la dirección del auditorio se percatase de la sustracción de los 5.000 euros tras regresar de las vacaciones de verano. Tal como adelantó este periódico, la denuncia tuvo lugar después de que los encargados de la administración económica del Palau realizasen un arqueo del dinero depositado en una caja de seguridad para abonar las devoluciones de entradas por la cancelación de conciertos, y comprobar que había 5.000 euros menos que a finales de julio. El presunto robo sucedió, pues, en agosto, cuando el Palau permanece cerrado y sin actividad y cuando solo pueden entrar en él los empleados de la seguridad y de mantenimiento.

Durante estos días tanto la oposición en el ayuntamiento como los trabajadores a través del comité de empresa han exigido a la presidenta del Palau que dé explicaciones sobre lo sucedido más allá de las declaraciones realizadas ante la prensa.

Ayer mismo, la concejala de Ciudadanos, y miembro del consejo de administración, Amparo Picó, anunció que su grupo «pedirá responsabilidades políticas» por la «patente falta de aplicación de los protocolos más básicos de seguridad en el Palau de la Música». «Sin director, sin gerente y ahora sin dinero. Esperamos medidas contundentes, y razonables, por parte de Gloria Tello», declaró Picó, quien ha añadido que «lo más razonable, desde luego, sería que Tello reconociera que no está sabiendo gestionar el Palau de la Música, algo que no es una impresión de la oposición, es un hecho que denuncian los propios trabajadores».