El Juan Uslé de los últimos 40 años se pasea a sus anchas por las inmensas salas de Bombas Gens. Del negro a los colores más vividos. «Juan Uslé. Ojo y pasaje», reúne en la antigua fábrica de bombas hidráulicas 165 cuadros del Premio Nacional de Artes Plásticas. De todas ellas, cinco no se habían expuesto nunca. Instituciones públicas y privadas han prestado obras para esta primera gran retrospectiva que se hace en València de Uslé en los últimos 25 años, explica Sandra Guimarães, la directora del centro.

Una de las obras de la exposición de Bombas Gens. F. Calabuig

Guimarães presentó esta exposición junto al propio artista, la vicepresidenta de la Fundación Per Amor l’Art, Susana Lloret, y Vicente Todolí, asesor de la Colección Per Amor a l’Art, que en esta ocasión ha ejercido también de comisario junto a Nuria Enguita, ahora directora del IVAM.

«Juan Uslé. Ojo y paisaje», que se podrá visitar hasta septiembre, presenta una selección de obras del artista desde finales de los años 80 hasta una muestra de la serie «Soñé que revelabas», con obras realizadas en los últimos diez años, algunas de incluso 2020.

Las primeras obras, que datan de los 80, muestran la época en la que Uslé comienza a cuestionar la relación entre paisaje, visión y mente, entre abstracción, pinceladas robustas y acuarelas. Ya en la época de los 90 pasa a la interrogación del lenguaje pictórico con paisajes de colores intensos que alternan el gesto y la geometría. Y se cierra con su última época, más íntima en una suerte de autorretratos o dibujos que funcionan a modo de notas o pruebas.

La exposición nació del estudio de las tres obras de Uslé pertenecientes a la colección Per Amor a l’Art. Por ello, Todolí, destacó «el profundo trabajo de investigación de la larga trayectoria artística de un autor tan reconocido internacionalmente y del que mostramos obras de nuestra colección pero también muchos préstamos de otras instituciones, coleccionistas privados o el propio artista».

Así, el propio Uslé aplaudió que Bombas Gens haya «hurgado buscando intensidad», aunque reconoció haber sentido «el miedo inevitable de la idea de mirar al pasado y saber que nos espera el encuentro con obras y hechos que apenas recordamos».

La muestra supone, para Guimarães, «una oportunidad única» para contemplar la obra de un artista «figura clave nacional e internacional». «Este es un viaje a los lugares desconocidos que nos amplían nuestra visión del mundo».

Otra de las obras de Uslé en Bombas Gens. F. Calabuig

Arte en tiempos de pandemia

En tiempos de coronavirus, «el arte es una necesidad, es un movimiento de resistencia», explicó la directora del centro. Mientras que Lloret aseguró que «nunca hemos querido adquirir obras de arte para tenerlas en un almacén. El arte es una forma de comunicación, y para que comunique, para que emocione, sorprenda, inquiete, o incluso provoque, tiene que interactuar con las personas. En las actuales circunstancias, nos parece aún más esencial provocar reacciones más allá de esta cotidianidad tan dura y desconcertante, poniendo el foco en algo tan estimulante como el arte y artista, en este caso Juan Uslé».