La obra del artista valenciano Manolo Valdés resiste a los contratiempos del coronavirus para ser expuesta desde hoy en Roma, en la primera muestra del artista valenciano en la capital italiana desde 1995 y que repasa su carrera escultórica y pictórica.

La exposición, en el céntrico Palacio Cipolla y organizada por la Fondazione Terzo Pilastro, fue inaugurada el pasado octubre, pero tuvo que cerrar poco después por las medidas contra la pandemia.

Ahora ha reabierto sus puertas y prorrogado su estancia hasta el 11 de julio, aprovechando que la región del Lacio es "zona amarilla", es decir, está considerada de riesgo de contagio leve y permite la apertura de museos y exposiciones.

Su comisario, Gabriele Simongini, explicó durante una visita que la idea es "hacer dialogar escultura y pintura", de modo que "el cuadro se convierta en escultura y la escultura adquiera los colores del cuadro".

"Los lienzos se vuelven tridimensionales, salen de los límites de la tela y casi se transforman en esculturas, mientras que estas, sobre todo las de madera, usan tipos diferentes de este material que dan a las figuras una carga de color", consideró.

Manolo Valdés en una foto de archivo. EFE/ Manuel Bruque

Esta muestra supone el retorno de la obra de Manolo Valdés a Roma después de veinticinco años, aunque Simongini aclaró que en aquella exposición "había un número limitado de obras y no era comparable" a la que ahora puede disfrutarse en esta Roma más vacía de lo normal.

De hecho, añadió, a pesar de haber expuesto en otras ciudades de toda Italia, "nunca ha habido una tan importante como esta".

"Valdés vuelve con gran fuerza", celebró el comisario.

La exposición de Manolo Valdés en Roma.

40 años de carrera

El recorrido abarca casi cuarenta años de la carrera del artista, desde los primeros años Ochenta, tras el fin de su grupo "Equipo Crónica", hasta la actualidad, para ahondar en su proceso creativo.

En los pasillos y salas del palacio destacan varias de sus Meninas, una de sus creaciones más icónicas, elemento central de la exposición y que expresan "el diálogo entre realidad e ilusión, que son el sentido del arte para Valdés", ilustró el comisario.

Sus pinturas y esculturas se basan en los artistas que él admira, como Velázquez, Matisse, Léger o Zurbarán, tomando forma con varios materiales como el bronce, el aluminio, la madera o el alabastro.

El comisario celebró la vuelta del valenciano a la capital italiana, un lugar que él mismo aprecia por su milenaria historia que, como ha reconocido en alguna ocasión, supone una ventaja para sus artistas nativos, siempre inspirados por la Ciudad Eterna. 

Las últimas exposiciones de Manolo Valdés han sido en París y Miami, en plena pandemia.