El Institut Valencià de Cultura presenta los días 9, 10 y 11 de abril en el Teatre Principal de València la obra ‘Principiantes. De qué hablamos cuando hablamos de amor’. Es la adaptación teatral, de Juan Cavestany, de uno de los relatos más conocidos de Raymond Carver, que fue originalmente publicado en 1981.

La dirección de la obra es de Andrés Lima, y Javier Gutiérrez, Mónica Regueiro, Daniel Pérez Prada y Vicky Luengo son los actores de la misma.

La pieza gira en torno al tema del amor a través de estos cuatro personajes que conversan en una cocina: un matrimonio ‘veterano’ y una pareja de amigos más jóvenes cuya relación es más reciente. A lo largo de una tarde, en una atmósfera marcada por la luz cambiante, los cuatro comparten sus experiencias e ideas, grandes y pequeñas, sobre lo que significa el amor y la necesidad del otro.

Romántica y desgarradora, realista y poética al mismo tiempo, la pieza no solo es referente de una época sino que nos atrapa hoy con la fuerza de una pieza de música esencial.

Cuando el relato vio la luz por primera vez, fue recortado a la mitad por Gordon Lish, amigo y editor de Carver. Pero este montaje se ha basado sobre todo en la versión original, que se recuperó en 2007, y también se ha recurrido a otros pasajes y fragmentos del autor americano, ya que la propuesta quiere ser una inmersión completa en los elementos recurrentes del universo Carver: las relaciones de pareja, el amor y el alcohol como refugios pero también como armas mortales, la predestinación frente al azar, y la textura literaria de la experiencia americana. 

A la pregunta del título se enfrentan cuatro personajes: un cardiólogo que no sabe nada de asuntos del corazón, una mujer enamorada de quien le rompió el corazón y algunos huesos, un hombre envuelto en una coraza y una mujer crisálida convirtiéndose en algo desconocido para ella.

En una larga tarde Herb, Terry, Nick y Laura hablan, discuten, se besan, se pelean, se escuchan, se entristecen, se temen, se atreven, se desmayan, se enfurecen, se abrazan, se emborrachan, se desesperan y se preguntan por el amor. Y nos reflejan y nos preguntan y es imposible no verse reflejado.