La llamada "guerra de las palomitas" no da tregua. Después que un juez diera la razón a la Conselleria de Sanidad a la hora de prohibir el consumo de bebida y comida en las salas de cine a causa de la pandemia, los dueños de los cines han iniciado una cruzada por conseguir que la codiciada palomita vuelva a sus salas.

La Asocaición Valenciana de Empresarios de Cine (AVECINE) y la Federación de Entidades de Empresarios de Cine de España (FECE) han emitido hoy un comunicado en el que acusan a la conselleria de provocar "una disminución adicional de espectadores en los cines valencianos". "Los espectadores están dispuestos a cancelar la compra de la entrada porque no pueden comer palomitas", denuncian desde estas organizaciones.

"Es indiscutible la asociación que existe en los espectadores entre ir a un cine y comer palomitas mientras ven una película, hasta tal punto que, para determinados films, es una relación indisoluble, y por tanto si no hay palomitas, no hay cine. Si a una pérdida del 100% de la venta del bar hay que sumar un 33% de espectadores que cancelan la compra de entradas si no pueden consumir palomitas ¿Cómo van a sobrevivir las salas de cine de Valencia?", se preguntan estos colectivos.