Con cerca de una decena de exposiciones aún abiertas durante este verano, el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) ya tiene la mirada puesta en el otoño, con las muestras que protagonizarán su «vuelta al cole». Desde el más clásico Ignacio Pinazo hasta la juventud del valenciano Guillermo Ros, pasando por el activismo de Miguel Benlloch. Así será el otoño del IVAM.
Del 23 de septiembre al 5 de junio de 2022
El IVAM tenía previsto inaugurar esta exposición el pasado mes de junio, sin embargo, unas obras de adecuación de la sala Pinazo -la sala de la Muralla- en la climatización e iluminación han obligado a retrasar su apertura hasta el otoño. Esta exposición, comisariada por Vicente Pla Vivas, aborda el «disciplinado» ejercicio de Pinazo para registrar muchedumbres y grupos humanos, además de su producción de abundantes imágenes sobre la vida colectiva en los espacios públicos, avanza el museo. La muestra reúne más de 300 obras pintadas por el artista, en su mayoría, para él mismo. La exposición incluye pinturas, dibujos, fotografías, películas y documentación procedentes de museos como el IVAM, el Museo Nacional del Prado, el Museu Nacional d´Art de Catalunya, la Casa Museo Pinazo de Godella, el Museuo de Bellas Artes San Pío V de València, el Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí, el Institut Valencià de Cultura, la Biblioteca Valenciana, el Museu Valencià d´Etnología, la Biblioteca Serrano Morales y la Biblioteca Histórica Municipal de l’Ajuntament de València, la Filmoteca de Castilla y León, el Museu del Cinema de Girona, Eye Filmmuseum de Ámsterdam, la Filmoteca Española, la Biblioteca Nacional, el Centro Geográfico del Ejército y Cartoteca de la Universitat de València, además de particulares como María Jesús Romeu Soriano, María Silla, Vicente Valentín y Rafael Solaz.
Del 7 de octubre al 6 de febrero de 2022
«La violencia inherente en el proceso de creación centra el proyecto de Guillermo Ros (Vinalesa, 1988): la violencia que genera cualquier proceso de creación artística, una violencia cultural que legitima, justifica y promueve la idea de autoexplotación como necesidad personal para el artista, que vive muy frecuentemente en la precariedad», explica el IVAM sobre la muestra que dedica al joven artista valenciano.
En la instalación de la Galería 6 del IVAM, Ros describe al artista como un ser violentado, absorbido por el trabajo y que olvida su propia condición física y mental. «Un ejercicio de violencia» es un diálogo con la arquitectura del museo. Se trata, en definitiva, de un ejercicio de analogías, imaginario, «que suman para culminar en una producción de tintes épicos». Ros toma el concepto de «lore», propio del lenguaje de los videojuegos, que supone el trasfondo de una historia o de un personaje, y lo traslada al ámbito artístico: el «lore» de los elementos de la exposición, de la arquitectura del museo y el suyo propio. Presenta una «mezcla perfecta» de referentes que conforman su personal entramado conceptual.
Guillermo Ros actualmente vive y trabaja en Alboraia. Se licenció en Bellas Artes por la Universitat Politècnica de València, donde realizó posteriormente el Máster de Producción Artística. Su trabajo -desarrollado fundamentalmente en el ámbito de la escultura y la instalación- se ha expuesto en València, Barcelona, Palma de Mallorca o Madrid, y en el ámbito internacional en Bogotá, Lisboa, Viena, Oporto y Londres, y ha sido objeto de varios premios, entre ellos el Premio Senyera de artes visuales de 2020. La obra de Ros forma parte de colecciones privadas e institucionales de ámbito nacional e internacional. «Un ejercicio de violencia» está comisariada por Nuria Enguita, directora del IVAM.
Del 11 de noviembre al 20 de marzo de 2022
La exposición revisa el pensamiento, la actividad militante y la obra estética de Miguel Benlloch desde el cuerpo, la palabra y el objeto. El artista desarrolló en Granada una importante trayectoria como performancero, poeta y activista político y cultural.
«Desde la militancia de Benlloch en el Movimiento Comunista, en los Frentes Gay o en los movimientos anti-OTAN, pasando por el trabajo como productor, su práctica estética contribuyó a deconstruir los discursos binarios y las fórmulas normativas respecto al género, proponiendo otras políticas de carácter transidentitarias y queer», apuntan desde el IVAM. Otro rasgo constante en sus piezas, desde los años 70 hasta su fallecimiento en 2018, fue la oposición a lo normativo, el desafío a los dogmas.
La muestra, comisariada por Alejandro Simón, Joaquín Vázquez y Mar Villaespesa, mostrará la relación del trabajo de Benlloch con la idea de lo carnavalesco, la subversión del lenguaje y sus inicios en la actividad performancera con el ‘Cutre Chou’, parodias cabareteras sobre acontecimientos políticos del momento.
