‘So she doesn’t live’, el tercer trabajo del director bosnio Faruk Loncarevic, y ‘Streams’, el nuevo film del tunecino Medhdi Hmili, fueron las dos películas de la Sección Oficial que la Mostra de València estrenó en la quinta jornada del festival de cine mediterráneo.

‘So she doesn’t live’ es un desgarrador largometraje basado en el asesinato real de una joven en un pequeño pueblo bosnio. Lončcarevićpresentó ayer su trabajo como resultado de las circunstancias de una sociedad en particular, pero a pesar de estar fuertemente arraigada en aspectos concretos de la realidad bosnia, es fácil imaginar esta historia en cualquier otro lugar.

Loncarevic expone los hechos del caso con precisión quirúrgica a partir de largos planos secuencia milimétricamente diseñados. La distancia con la que la cámara manejada por el director de fotografía Alen Alilović observa un entorno hermoso y, no obstante, habitado por el horror; el tan doloroso como magistral uso del fuera de campo.

Por su parte, en ‘Streams’, el director y guionista Medhdi Hmili se mantiene en sus temas habituales: historias de desfavorecidos y denuncia de la corrupción política. El film retrata el colapso de una familia de clase trabajadora y denuncia las contradicciones sociales del Túnez posterior a Ben Ali, un país que deja a la gente sola frente a unos problemas insuperables.

«Retomo tres temas que siempre me han perseguido: la familia, la violencia y el amor. A través de ellos trato de describir y traducir la compleja existencia de una madre y su hijo», señaló el director tunecino durante la presentación en rueda de prensa.

Además de los pases de otras dos películas de la Sección Oficial (’Souad’ y ‘Luzzu’), la Mostra estrenará hoy a las 19.00 horas ‘Sedimentos’, el documental del realizador valenciano Adrián Silvestre, en el que seis mujeres trans viajan a un pequeño pueblo leonés donde explorarán insólitos paisajes, así como los entresijos de su propia personalidad.