Pasear por la sala Dormitorio, en lo más alto del Centre del Carme, ofrece al espectador una sucinta estampa de la creación artística actual. Fotografía, pintura, instalaciones, dibujo, vídeo o esculturas. Son algunas de las disciplinas que recoge la exposición «Art contemporani de la Generalitat Valenciana V», con las 19 obras adquiridas por el Gobierno autonómico el año pasado.

La muestra, que se puede visitar hasta el próximo 11 de septiembre, reúne las piezas que la Conselleria de Cultura adquirió en 2021 en la quinta campaña de esta iniciativa. Desde entonces se han comprado ya 129 piezas de artistas nacidos o residentes en la Comunitat Valenciana. La selección de la sala Dormitorio reúne bajo el mismo techo la obra de artistas más veteranos con nombres emergentes del arte valenciano. La temática es tan variada como sus creadores: la tragedia de quienes mueren en el mar, interpretaciones del paisaje y la naturaleza, las heridas del alma o los excesos de la sociedad de consumo son algunos de los aspectos que abarcan las obras creadas por Carmen Ballester, Geles Mit, Manuel Sáez, Maria Llopis, Pascual Arnal, Joan Sebastián, María Zárraga, Pamen Pereira, Paula Prats, Raúl Belinchón, Rebeca Plana, Robert Ferrer i Martorell, Silvia Molinero, Clara Sánchez Sala, Eduardo Infante, María Dolores Mulá, Perceval Graells, Ricardo Cases y Rosalía Banet.

El director del Consorci de Museus y del Centre del Carmen, José Luis Pérez Pont, ha explicado este jueves en la presentación de la obras que el objetivo de esta colección es «la pulsión del arte contemporáneo, no hay temáticas limitadas. El arte evoluciona porque los artistas evolucionan». No obstante, sí señala que «el pulso con la realidad es la constante. Hay una vinculación con la realidad de nuestro tiempo», explica Pérez Pont.

El responsable del organismo interprovincial ha estado acompañado por algunos de los artistas que firman las obras de esta colección. Como Manuel Sáez (Castelló, 1961) cuya serie «Dios los ve» forma parte de esta exposición. El artista califica de «milagro» el hecho de que la Generalitat haya invertido tiempo y dinero en la adquisición de obras de arte contemporáneo. Los cuadros de esta serie muestran la figura del tapón de una licorera del siglo XIX que, sin embargo, acepta distintas posiciones y, por tanto, interpretaciones, dice el propio Sáez, quien asegura huir de la palabra «concepto» para defender la «sustancia». Para él, compartir colección con artistas más jóvenes supone una oportunidad de aprender y «un aliciente constante».

Las obras de esta quinta edición de la iniciativa se podrán ver este año en un total de 12 exposiciones itinerantes por distintos puntos de la Comunitat Valenciana. A ello, Pérez Pont ha adelantado que el organismo está trabajando en la idea de reunir las 129 obras adquiridas desde 2017 para celebrar la efeméride de un lustro de arte contemporáneo en la Generalitat Valenciana.