Para quien todavía no lo sepa, València no solo es la capital del diseño, sino también la del videojuego. Desde hace 12 años, la ciudad acoge el mayor festival de ocio digital de España, un sector al alza, al igual que la popularidad de este certamen, especialmente atractivo para las nuevas generaciones.

El DreamHack València celebra su próxima edición esta semana, entre el 1 y el 3 de julio en Feria València. Está prevista la asistente de unos 75.000 asistentes, un 15% más que en 2019, cuando se realizó su última edición antes de la pandemia.

Aunque al tratarse de un evento sobre ocio digital, sus asistentes no solo se deben contar en formato presencial. La organización ya cuenta con dar cabida a unas 20 millones de personas en formato online, es decir, siguiendo las partidas o visualizando el contenido que transmitirán los influencers invitados al evento. Cada edición del DreamHack atrae una mucha expectación a nivel internacional, sobre todo, porque este festival es considerado como el mayor evento deportivo online de España. Hablamos de los eSports, los deportes que se juegan de manera electrónica, como el Fortnite, el Fifa o League of Legends.

«València se ha convertido en la capital española de los eSports. El impacto económico que es capaz de generar en la ciudad supone una importante inyección económica que la consolida como un destino clave para los amantes de los videojuegos», explicó Javier Carrión, director de DreamHack València, durante la presentación del certamen.

Los eSports facturaron en 2021 34 millones de euros solo en España, según el informe elaborado por la consultora Newszoo sobre el mercado global de los deportes electrónicos. Los espectadores de estas competiciones no dejan de crecer. De hecho, este informe augura un aumento de la audiencia online de un 13,8%, llegando así a los mil millones de espectadores en 2023.

Uno de losusuarios del DreamHack.

Uno de losusuarios del DreamHack. G. C.

«Esperamos que esta nueva edición se convierta en una fecha trascendental para esta industria en España», resaltó el organizador, ya que el año pasado el festival generó un impacto económico de más de 4,4 millones de euros en València, una cantidad que el certamen se ha propuesto doblarar este año, ya que prevén que el impacto podría llegar a los 10 millones de euros. Tal y como aclaró la organización a Levante-EMV, esta previsión nace de un informe de evaluación interna basado en una encuesta realizada a los visitantes en 2019 y diversos datos de consumo recogidos.

«La celebración de este certamen es clave para la ciudad. El modelo económico en el que estamos trabajando, de la mano de la Generalitat, marca una línea estratégica que va muy ligada con la innovación económica y la tecnología, donde el gaming y los eSports cuentan con un papel preponderante», explicó el concejal de Hacienda Borja Sanjuan.

Qué es exactamente el DreamHack València

El DreamHack se celebró por primera vez en 1994 en Suecia como una reunión anual de aficionados a los videojuegos. 28 años después, el festival cuenta con un récord Guiness por el mayor número de dispositivos conectados a internet del mundo.

El certamen se encuentra en un recinto cerrado, en este caso Feria Valencia, dividido en tres espacios diferenciados. Por una parte, la zona de exposición donde se encuentran las principales empresas del sector y escaparates donde los asistentes pueden comprar productos relacionados con sus videojuegos favoritos.

Por otra parte, está la zona dedicada a los eSports, donde tienen lugar los torneos profesionales de videojuegos. Mientras los jugadores oficiales realizan sus partidas, el resto de asistentes puede contemplarlas a través de grandes pantallas. En estos torneos hay 400.000 euros en juego.

Sin embargo, la zona más popular del festival es la que da cobijo a la ‘Lan Party’, donde 3.000 asistentes pueden jugar a la vez, aunque cada uno con su ordenador personal. Aquí se realizan verdaderos maratones. De hecho, más de un asistente no duda en echarse una siesta para seguir jugando, pues esta zona está abierta las 24 horas del día. Este año se realizarán competiciones no-profesionales con premios de hasta 30.000 euros.

Las entradas para el DreamHack van desde los 12 euros (entrada de un día) a los 80 euros que cuesta el acceso con reserva de asiento en la zona de la ‘Lan Party’.