El Consell y la Fundació per Amor a l’Art han alcanzado un principio de acuerdo para que el IVAM se haga cargo a partir del segundo semestre de 2023 de la gestión de parte del centro cultural Bombas Gens en el barrio de Marxalenes. De esta forma, y según ha podido saber este periódico, el instituto de arte moderno podrá utilizar algunas naves de la antigua fábrica de estética «art decó» para actividades propias.
Con este proyecto conjunto entre Per Amor a l’Art y el gobierno autonómico -del que, de momento, no han trascendido más detalles-, Bombas Gens daría comienzo a una nueva etapa dentro de su trayectoria como centro cultural. La fundación es un proyecto familiar impulsado y dirigido desde el año 2014 por la doctora en Psicología de la Universitat de València, Susana Lloret, junto a su marido, el empresario y coleccionista de arte José Luis Soler.
Su objetivo es el impulso de las artes, la investigación y la obra social, y para desarrollarlo adquirieron y rehabilitaron una antigua fábrica de bombas hidráulicas en el barrio de Marxalenes que empezó a funcionar como museo en julio de 2017. La primera directora artística del Centre d’Art Bombas Gens fue Núria Enguita, actual responsable del IVAM, y contaba con el asesoramiento artístico del exdirector de la Tate Modern de Londres, Vicent Todolí.
Una etapa de cambios
Varias circunstancias han modificado en los últimos años la trayectoria del centro cultural de Marxalenes. Por una parte, la marcha de Enguita al IVAM en septiembre de 2020, la contratación de la gestora cultural portuguesa Sandra Guimarães para dirigir el centro y la desvinculación de Todolí con el proyecto han hecho que Bombas Gens abra su espacio expositivo a otras disciplinas -como el cine (con la exposición dedicada a Berlanga que organizó la Academia de Cine) o el diseño- además de al arte contemporáneo.
Por otra parte, la enfermedad de José Luis Soler y la pandemia del coronavirus han dificultado al matrimonio responsable de la fundación su actividad como coleccionistas. Además, para mantener la viabilidad del proyecto, Per Amor a l’Art ha ofrecido sus instalaciones en Marxalenes para acoger más iniciativas y eventos, como presentaciones o convenciones.
De esta forma, el ofrecimiento realizado por parte de Per Amor a l’Art a varias instituciones públicas para disponer de Bombas Gens y gestionar su actividad, y la aceptación por parte de la Generalitat, supondrá el comienzo de una nueva etapa para este centro que en sus apenas cinco años de trayectoria se ha consolidado como uno de los atractivos culturales más importantes de la ciudad.
Expansión en València
El acuerdo también implica una nueva expansión del IVAM en la ciudad de València. Tal como su directora, Nuria Enguita, señaló en una entrevista a Levante-EMV el pasado octubre, posiblemente no será hasta el primer semestre de 2024 cuando la subsede del museo en el Parc Central entre en funcionamiento. Y eso que las previsiones iniciales de la Conselleria de Cultura eran que el IVAM-Parc Central abriese sus puertas a mediados de 2023.
Por de pronto, en el presupuesto de la Generalitat para el próximo ejercicio sí se contempla una partida de 1,59 millones de euros para la nueva sede del IVAM el Parc Central, aunque es la misma inversión prevista en el ejercicio anterior que, finalmente, no se ejecutó. El objetivo del instituto es que la nave de Ribes ofrezca en sus dos futuras salas las instalaciones y exhibiciones de corte más experimental.
Pero quizá el nuevo proyecto del IVAM en Bombas Gens tenga más que ver conceptualmente con el de la subsede en Alcoi, abierta desde noviembre de 2018 en el Centre d’Art (CADA) de la localidad alicantina y que exhibe piezas de los extensos fondos del IVAM pero también realiza proyectos propios con los artistas y propuestas de la provincia.
Una iniciativa privada que abrió el abanico
La inauguración en 2017 del centro cultural Bombas Gens con una exposición dedicada a Bleda y Rosa supuso el primer paso importante tomado por la iniciativa privada para abrir el abanico de la promoción y la exhibición del arte (sobre todo, internacional) en València. Un paso que seguirá dentro de unos meses el futuro Centro de Arte Hortensia Herrero o el de la Fundación Juan José Castellano Comenge. Además, desde el pasado junio la ciudad cuenta también con su sede de CaixaForum, con su propia programación de exposiciones artísticas.
A estas iniciativas privadas y más o menos recientes dedicadas al arte contemporáneo hay que añadir otras que funcionan desde hace tiempo como la de la Fundación Chirivella Soriano o la Fundación Bancaja y, ya desde la gestión pública, el Centre del Carme de Cultura Contemporánea (que es además que el que más visitantes recibe a lo largo del año) y, por supuesto, el IVAM.
Pero, a diferencia de la mayoría de estos centros la Fundació per Amor a l’Art compagina en su sede de Marxalenes la vertiente artística - que en 2018 fue reconocida con el premio ‘A’ al coleccionismo de la Fundación ARCO- con una más social centrada en el bienestar de menores en riesgo de exclusión social y en el contacto con los colectivos vecinales del barrio en el que se ubica el centro.
