Fallece Cuco Villanueva, el guitarrista que aupó a Bruno Lomas

El líder de Los Rockeros, la banda de acompañamiento del ídolo valenciano, murió el pasado miércoles

Bruno Lomas y Los Rockeros. Cuco es el primero por la derecha.

Bruno Lomas y Los Rockeros. Cuco es el primero por la derecha. / L-EMV

Voro Contreras

Voro Contreras

Joaquín Villanueva “Cuco”, guitarrista de Los Rockeros, la histórica banda que acompañó a Bruno Lomas en los inicios de su carrera en solitario, murió el pasado miércoles en València y ha sido enterrado hoy. Villanueva, que se retiró de la música a finales de la década de los 60 para retomar sus estudios, fue uno de los responsables de armar el potente y característico sonido sobre el que Bruno conquistó el mercado español a base de canciones que iban del rock’n’roll al pop beatliano pasando por el rhythm and blues e incluso el soul.

Tal era la calidad de Los Rockeros como banda de acompañamiento del ídolo valenciano que no tardaron en ser comparados con aquellos Shadows que flanqueaan a Cliff Richard. Como los británicos, también Cuco y sus compañeros de banda se atrevieron con varios discos sin el cantante que hoy están considerados como uno de los mejores trabajos de la escena valenciana de la época.

Una proposición

Antes de ser Los Rockeros, “Cuco” Villanueva, Pascual “Pipo” cortés, Sento Buj Figueras y Lucho Segarra habían formado Los Diávolos, una banda que no tardó en hacerse un nombre preferente dentro del hervidero musical que era la València de la época. Tanto fue así que cuando Bruno Lomas -por entonces, todavía Emilio Baldoví- se separó de los Top-Son para iniciar una gira por Francia, el cantante propuso a estos cuatro jóvenes que le acompañaran.

Cabe recordar que los Top-Son eran los herederos de Los Milos, la banda que formó Bruno a finales de los 50 y cuyo guitarrista, Salvador Blesa, también falleció el pasado mes de enero.

Los Diábolos cambiaron su nombre por Los Estrellas de Fuego y emprendieron con Bruno un viaje que les llevó primero al casino de Biarritz y otras localidades de la costa atlántica francesa y que culminó en París para actuar en clubes como el Meted, Elle et Lui o el Club de la Licorne donde, según cuenta la historia o la leyenda, fueron felicitados por el mismo Alain Delon.

Pero el momento más decisivo para los cinco músicos valencianos sucedió cuando actuaron ante Bruno Coquatrix, jefe del mítico Olympia de París, quien los apadrina y les cambia el nombre. A Emilio le cede el Bruno para convertirlo en Bruno Lomas y a Cuco y sus compañeros los bautiza con la denominación por la que alcanzarían la popularidad.

En el Olympia, Bruno et Ses Rockeros se especializan en un repertorio que mezcla el rock’n’roll con versiones de aire hispano como “Angustia”, “La bamba”, “El jinete” o “Perfidia”. Este bolero convenientemente rockerizado fue incluido en el primer sencillo que graban los cinco valencianos también en París antes de seguir su gira por Bélgica y el Norte de Europa.

En el portaviones

En 1964, Bruno, Cuco y el resto de la formación regresan a València de forma triunfal con un gran concierto en el Teatro Principal y, unos meses más tardes, con una casi mítica actuación en el portaaviones Forrestal, anclado en el puerto de la ciudad y donde los soldados estadounidenses flipan con la versión del "What’d I say" de Ray Charles que les ofrecen Lomas y su banda de acompañamiento.

A partir de entonces, Bruno y sus Rockeros se consolidan, por su calidad, por su virtuosismo y por su carácter, como una de las mejores y más auténticas bandas de rock españolas de los años 60. Además de girar por todo el país, graban espectaculares sencillos repletos de versiones y algunos temas propios compuestos por el propio Baldoví. De esta época hay que destacar joyas como las reinterpretaciones de The Animals (“La casa del sol naciente” y “Comprensión”), el “Perdóname amigo” de Johnny Guitar Watson, el “Carol” de Chuck Berry, “Ahora sé” o “Es posible”.

Además de acompañar a Bruno, Los Rockeros también graban sus propios discos sin él, entre los que se incluye una versión del “En forma” de Glenn Miller pasada bajo el tamiz de The Shadows que se convierte en un importante éxito local. También se atrevieron con el “María” de “West side story”, el “Vendedor de melones” de Herbie Hancock y “Caravana” de Duke Ellington. Casi nada.

Sin Bruno

Cuco y compañía también compondrían sus propios temas y, después de que en 1966 Bruno cambiase de formación para introducirse en nuevos sonidos más propios de la segunda mitad de los 60, Los Rockeros siguieron grabando aunque la repercusión que obtuvieron sus trabajos fue mucho menor.

En 1969 Cuco Villanueva y Vicente Buj decidieron dejar la música y retomar sus estudios universitarios abandonados durante media docena de años. Pipo Cortés inició una carrera como cantante solista bajo el seudónimo de Tino Frontiera y Galileo Marco -que había entrado por Lucho Segarra unos años antes- se convierte en uno de los más cotizados baterías españoles, tocando en las bandas de acompañamiento de numerosos artistas como Lorenzo Santamaría, María Jiménez o el propio Bruno Lomas.

En 1991, un año después de la muerte en accidente de tráfico de Bruno Lomas, Pipo Cortés fallece también en accidente y en 1995 Galileo Marco seguirá la misma suerte. En 2012 Sento Buj recupera a Los Rockeros para grabar con otros músicos de los 60 un nuevo disco en el que Cuco decide no participar.  

Los Rockeros

Los Rockeros / L-EMV