Sorolla y Picasso, dos opuestos imprescindibles bajo el mismo techo
La Fundación Bancaja logra reunir en tiempo y espacio a dos de los españoles más internacionales de la Historia del Arte
«Picasso y la modelo. El perfil de Jacqueline» y «En el mar de Sorolla con Manuel Vicent» protagonizan el otoño en el centro cultural
El pasado año 2023 se cumplió un doble aniversario en el mundo del arte: el centenario de la muerte de Joaquín Sorolla (1863-1923) y los 50 años del fallecimiento de Pablo Picasso (1881-1973). De los dos artistas, genios cada uno en su estilo, se han celebrado, todavía bien entrado 2024, múltiples actividades y exposiciones. Ahora -juntos, pero no revueltos- la Fundación Bancaja reúne bajo el mismo techo sendas muestras dedicada a estos artistas como, además, broche de oro al décimo aniversario de la institución sociocultural: «Picasso y la modelo. El perfil de Jacqueline» y «En el mar de Sorolla con Manuel Vicent».
De este modo, el centro de la plaza de Tetuán logra un fenómeno poco habitual: que el visitante contemple en un mismo edificio y con una sola entrada obras maestras de dos de los artistas españoles de mayor fama internacional. Además, no es casual esta coincidencia. La Fundación Bancaja tiene un vínculo especial con ambos artistas. Con una exposición de Sorolla (la imponente «Visión de España» con los paneles de la Hispanic Society of America) inauguró la remodelación de su sede en 2007, mientras que Picasso es un artista más que presente en su colección y programación año tras año: Bancaja es la institución privada con la mayor colección del mundo de obra gráfica del artista malagueño.
Obsesión ‘picassiana’
La primera de las exposiciones en ‘aterrizar’ en el centro cultural ha sido «Picasso y la modelo. El perfil de Jacqueline», que ya se puede visitar hasta el 2 de marzo. La muestra revisa la presencia constante de la mujer como modelo en la producción de Picasso, centrándose en la importancia que Jacqueline Roque, su última mujer, tuvo en su vida y en su obra desde que la conoció en 1952 hasta la muerte del pintor en 1973. La exposición, comisariada por Fernando Castro y Laura Campos, ofrece un recorrido por más de 250 obras que revelan la representación recurrente que Picasso realizó de la temática del pintor y la modelo, mostrando su obsesión por la fascinación sensual del encuentro con la modelo.
La mujer fue un motivo constante en la obra de Picasso (y también en la de Sorolla, personificada en su esposa Clotilde), que fue capaz de captar infinidad de emociones de las mujeres con las que convivió, llegando a realizar más de 400 retratos de la que fue su musa y segunda esposa durante las dos últimas décadas de su vida. Sus representaciones femeninas no se limitan a una mera reproducción de la realidad, sino que se sumergen en una reflexión sobre la identidad, la sexualidad y la condición de la mujer en la sociedad.
La exposición de la Fundación Bancaja ahonda en el rostro de Roque. Picasso desplegó frenéticos ensayos tomando el semblante de Jacqueline como pretexto, sometiendo su perfil a extraordinarias metamorfosis, siendo capaz de repetir el motivo para conseguir singulares diferencias.
Picasso emplea diversas ópticas para plasmar el rostro de Jacqueline, recurriendo a formas primitivistas, a la geometría poscubista o al jugueteo con el clasicismo. Las revisiones históricas también permitieron a Picasso la representación de su mujer en las recreaciones que realiza de algunos de los pintores que más le influyeron, como El Greco, Velázquez, Rembrandt, Delacroix, Ingres, Manet, Van Gogh o Matisse.
La faceta de Picasso como grabador está presente en la muestra con obras de la Suite 347 y la Suite 156, junto con linóleos y libros ilustrados por el artista, entre los que se encuentran Carnet de la Californie, Le Carmen des Carmen y Les dames de Mougins.
Muestra ampliada
El malagueño aguarda en la primera planta de Bancaja a que llegue su ‘vecino’ de arriba. En la sala bautizada con su nombre, en la segunda planta, Sorolla ha comenzado ya su ‘mudanza’. Desde el pasado miércoles comenzaron a llegar las obras que formarán parte de «En el mar de Sorolla con Manuel Vicent», que abrirá al público el próximo viernes. Se trata de la muestra que se pudo ver en el Museo Sorolla de Madrid el pasado año, pero ampliada. En aquella ocasión la exposición contó con alrededor de 50 cuadros. Ahora, la Fundación Bancaja, como es habitual, dobla su apuesta y exhibirá más de un centenar de obras del maestro de la luz.
El jueves comenzó el montaje de «En el mar de Sorolla con Manuel Vicent». Se trata de la primera exposición de Sorolla que cuenta con un comisario del mundo literario, el escritor valenciano Manuel Vicent. El autor de La Vilavella se enfrenta a la pintura de Sorolla para proponer un diálogo entre la pintura y la literatura. Como comisario, plantea un recorrido poético y visual a través de una cuidada selección de obras. De esta forma, la representación del mar y sus escenas en la obra de Sorolla cobra nueva vida a través del relato literario y vivencial del escritor.
Según se pudo ver en Madrid, las vidas del pintor y el escritor, ambas junto al Mediterráneo y sus gentes, confluyen a través de tres líneas de discurso. Por un lado, el escritor levanta un relato de la experiencia con las pinturas de Sorolla y con la reconstrucción de su propia memoria, sus recuerdos y vivencias frente al mar. Por otro lado, Vicent da voz y vida a los personajes más característicos de Sorolla: pescadoras, marineros o burgueses. Por último, realiza una aproximación a la estética luminista de Sorolla. Pero además, la literatura de Blasco Ibáñez y la pintura de Sorolla son objeto de reflexión conjunta por parte del escritor.
Así será la exposición de Sorolla
En su versión madrileña, «En el mar de Sorolla con Manuel Vicent» se articuló en cuatro secciones en las que el mar es el escenario donde sucede el relato visual de Sorolla y el literario de Vicent: «El subconsciente está lleno de algas», «Un drama naturalista bajo la luz del Mediterráneo», «Veraneantes burgueses en el Cabanyal» y «En el mar de Xàbia». De esta manera, mientras que en la primera sección Manuel Vicent aborda su relación con el Mediterráneo desde la infancia hasta la adolescencia, en la segunda traslada al «drama naturalista palpable en los cuadros de Sorolla con su brillante luz del sol mediterráneo». La playa del Cabanyal es analizada por el escritor en la tercera sección, para en la última trasladar al visitante hasta Xàbia y así reflexionar sobre el placer, la belleza y el mar como forma de espiritualidad.
Destinos antagónicos
Sorolla y Picasso, cada uno en su estilo, son referentes en la Historia de Arte. Según Fernando Castro, comisario de la muestra de Picasso en la Fundación Bancaja, «la relación de Sorolla y Picasso es la de un perfecto y retórico quiasmo. Aunque puede ser que se ‘cruzaran’ en París en 1900, sus destinos son, en muchos sentidos, antagónicos. Cuando el joven malagueño, que había forjado su código estético (cuasi-nietzscheano) en Barcelona, se asentó en la Ciudad de la Luz, Sorolla ya había impuesto sus luminosos paisajes mediterráneos. El valenciano despreció o ni siquiera se paró a considerar el vanguardismo que despuntaba y Picasso fue capaz de capear la miseria de la bohemia para convertirse en el mito de la modernidad», dice Castro. «En buena medida Sorolla es un maestro decimonónico y su reino ya no sería del mundo acelerado que ensalzaron los futuristas. Afortunadamente, Picasso desbordó el academicismo y, aunque dejó pruebas de que sabía cómo afrontar la pintura ‘histórica’, encontró un mundo absolutamente inédito que materializó con el cubismo», añade el crítico de arte. «Coinciden -continúa- sus imaginarios en las salas de Fundación Bancaja: el Picasso final (las obras que compuso cuando era un octogenario lleno, todavía, de energía) y la fascinante sensualidad mediterránea de Sorolla». El público, concluye Castro, «podrá, de forma inmediata, percibir que sus ‘modelos’ y pasiones son de otros mundos».
Suscríbete para seguir leyendo
- La Guardia Civil alerta a toda España: 'Cuanto antes se denuncie, mejor
- Los atropellados en el Palmar por un conductor ebrio eran el expresidente de Feria Valencia Antonio Baixauli y su mujer
- El principal experto en el barranco del Poyo: 'Se puede desviar caudal al nuevo cauce para proteger l'Horta Sud
- Nueva vida para la centenaria Estación del Norte
- Un fallo de la Agencia Tributaria hará que muchos jubilados cobren hasta 4.000 euros como compensación: serán estos
- Atropello mortal en la carretera del Palmar con un matrimonio fallecido
- Compromís pide que no se hagan las nuevas líneas de metro, una de ellas a La Fe
- Un conductor de EMT aborta el intento de agresión sexual a una menor por parte de tres hombres