Una ‘road movie’ desde la España profunda hacia Benidorm

La meta es Benidorm pero, antes, hay que cruzar media España profunda y la Comunitat Valenciana hasta llegar a ver el mar. "Lo carga el diablo" es una "road movie" dirigida por el valenciano Guillermo Polo y que este viernes llega a las salas de cine. Ya ha pasado por festivales de Miami, Mar del Plata, Cinema Jove, Seminci o Rizoma, además de Abycine Lanza.

La ópera prima de Guillermo Polo cuenta con buena parte de su ADN valenciano. Además de la dirección, se ha rodado en diferentes municipios de la Comunitat Valenciana —como Alicante, València o Calp— y está protagonizada por el actor castellonense Pablo Molinero. La película es una comedia negra con estética retro y toque kitsch, o de «naturalismo castizo», como indica Polo.

Junto a Molinero, completan el reparto Mero González, Isak Férriz, Antonia San Juan, Emilio Buale, Luifer Rodríguez, Manuel de Blas, Pino Montesdeoca e Itziar Castro, ya que este fue uno de los últimos proyectos de la actriz, a quien dedican el filme. También aparecen Manolo Kabezabolo y Eloi Yebra.

Las luces de neón, las carreteras secundarias del interior de España y la música son también parte fundamental de esta película ‘ibérica’. La banda sonora original está compuesta por temas de una veintena de intérpretes, entre ellos Dover, Camela, Pony Bravo, Yo Diablo, Los Invaders, Los Premios, Gabriel Ríos... «Al igual que los paisajes o los personajes, una buena selección musical acompaña y da sentido al viaje por carretera», explica Guillermo.

«Quise diseñar una ruta sonora tan variada como la geográfica, con canciones de grupos muy distintos entre sí, muchos de ellos nacionales para que aportaran carácter y cierto aire de culto al filme. Además, Pablo Croissier compuso la partitura original, que sirve de hilo conductor», indica. 

Tristán, un escritor de azucarillos

El protagonista es Tristán, un escritor frustrado que escribe frases inspiradoras en los sobrecillos de azúcar. Su rutinaria vida cambia cuando acepta, en misteriosas circunstancias, transportar el cuerpo congelado de su hermano Simón a través de España (desde Avilés, Asturias), para enterrarlo en la casa donde crecieron.

Aunque llevaban años sin hablarse, Tristán pronto descubrirá que el pasado y los errores de su hermano le persiguen y tendrá como compañera de viaje a Álex, una joven autoestopista a la que recogerá por el camino de este extraño viaje.

«El proyecto comenzó a tomar forma hace ya varios años, y la historia ha ido evolucionando. Todo nació a partir de una muerte: la del hermano del protagonista. Lo único que parecía quedar de él era su perro. De pronto, el personaje principal se ve obligado a encargarse de los asuntos no resueltos de un hermano conflictivo», dice Polo.

«Cuando la muerte irrumpe en nuestras vidas, surge una fragilidad que nos conecta tanto con el drama como con el humor. Ese fue el motor inicial del relato: el humor negro como escudo frente al absurdo de la existencia, y una mirada sobre cómo el pasado nos arrastra y lo complicado que resulta dejarlo atrás. Quería explorar la historia de quienes viven desorientados, atrapados en la resignación… y qué ocurre cuando, por fin, se atreven a cambiar».

La relación de dos hermanos

El filme trata la relación de dos hermanos y se da la circunstancia de que el de Guillermo Polo también es conocido en el mundo audiovisual. Javier Polo es la otra parte de Hermanos Polo Films —una de las productoras de esta película— fundada en 2017, y, aunque tienen miradas distintas, comparten el gusto por el humor negro, la excentricidad y cierto patetismo a la hora de hacer cine.

De hecho, este año Javier Polo estrenará "Pequeños calvarios", también protagonizada por Pablo Molinero, que se convierte en un excéntrico relojero. «Las relaciones de familia las carga el diablo. Las de hermanos también. ¿Pero cuáles no?», se pregunta el director de "Lo carga el diablo".

Sobre el tour ibérico que refleja la película, Guillermo Polo apunta: «son nuestras raíces, lo que queda de la España de antes. Esos lugares que si no mantenemos su esencia perderemos nuestra identidad. Y Benidorm, es un tutifruti perfecto donde terminar el viaje».

La película, que está en cines desde este viernes, está producida por Los Hermanos Polo Films, Japonica Films, Volcano Films y Batiak Films; con distribución de Begin Again Films.

Javier Polo llega con sus «Pequeños calvarios» al Festival de Málaga