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El regreso de Michael Schumacher a la competición va a ser el gran salvavidas del Gran Premio de Europa de Fórmula 1. Desde que Ferrari anunció el pasado miércoles que el alemán sería el sustituto del lesionado Felipe Massa, la venta de entradas para la carrera de Valencia se ha incrementado en un 50% respecto a la semana anterior, según anunció ayer Valmor Sports, organizador del evento. En siete días los aficionados han adquirido 10.000 localidades más, por lo que ya se ha superado más de la mitad del aforo actual del circuito urbano. Hasta ayer se habían alcanzado las 40.000 entradas vendidas de la 75.000 disponibles.

El regreso del que fue siete veces campeón del mundo de Fórmula 1 ha levantado una gran expectación. Primero entre los aficionados españoles, que ante la duda de si finalmente Fernando Alonso correrá en Valencia, han encontrado en la presencia del alemán el aliciente perfecto para no perderse una carrera que se presume histórica por la vuelta de uno de los grandes mitos del deporte.

Pero además, Schumacher se ha convertido en un "filón" para los aficionados alemanes e italianos. Valmor ha constatado a través de sus agentes oficiales de venta de entradas en el extranjero, una gran demanda desde Alemania y también desde Italia, ya que los aficionados transalpinos sueñan con volver a ver ganar al "kaiser" con los monoplazas de Ferrari.

Sobre el "efecto Schumacher" habló ayer Carlos Moreno-Figueroa, director general de operaciones de Valmor Sports: "La confirmación de la participación de Schumacher ha hecho que el nivel de la venta de entradas crezca en un cincuenta por cien respecto a las últimas semanas".

La organización del Gran Premio supera de esta forma el ecuador del aforo total del circuito, que está tasado en 75.000 espectadores para esta edición, aunque Carlos Moreno indicó que esperan "la confirmación de la participación de Fernando Alonso en la carrera para que termine de dar el último empujón a la demanda de entradas".

"El número final de espectadores dependerá mucho de la decisión que la FIA tome sobre la participación de Fernando Alonso -el próximo día 18, tres antes del inicio del GP-. La presencia del asturiano va a ser determinante pero estamos convencidos de que va estar, por lo que trasladamos al público que si viene va a disfrutar de un Gran Premio", afirmó.

Ya ha perdido tres kilos

Mientras, Michael Schumacher continúa con su preparación para estar en las mejores condiciones posibles en Valencia. El siete veces campeón del mundo reveló que ya ha perdido tres kilos desde que aceptó sustituir a Massa. "Estoy en la mitad de mi preparación para la primera carrera y ya he perdido tres kilos aunque para mí también es importante ganar masa muscular. Sólo tengo que admitir que el cuello me aprieta un poco", explica Schumacher.

Ecclestone lo alaba

Sobre la vuelta de Schumacher volvió a hablar ayer Bernie Ecclestone, quien está convencido de que el heptacampeón seguirá impartiendo lecciones a sus rivales: "Creo que dará a uno o dos de sus rivales una clase de conducción. No habría decidido volver si no tuviera opciones porque Michael es un chico competitivo".

En Spa se compra una entrada cada minuto

La vuelta a los circuitos de Michael Schumaxcher no ha servido de aliciente sólo para la carrera de Valencia. Otros grandes premios se frotan las manos ante la presencia del "kaiser". Así, los organizadores del Gran Premio de Bélgica, que se celebra en Spa, el trazado preferido de alemán, están viendo como la venta de entradas para el evento ha sufrido un aumento espectacular. Después de su regreso en Valencia, el "circo" se trasladará a Bélgica donde Schumacher debutó en la F1 en 1991, consiguió su primera victoria allí en 1992, y subió hasta seis veces más a lo más alto del podio. Según una agencia de noticias belga, los organizadores de la carrera han vendido más de 35.000 entradas tras el anuncio del regreso de Schumacher. Uno de los portavoces de la organización dijo que el ritmo de ventas se ha disparando alcanzando el "ticket por minuto". Los organizadores esperan una afluencia de más de 70.000 personas la carrera. El año pasado, poco más de 50.000 personas acudieron al mítico trazado. j