Iker Casillas, capitán de la selección española, ha cambiado su imagen al afeitarse la barba que ha mostrado durante esta temporada, buscando el giro de la fortuna que no acompañó a la 'Roja' en el debut en el Mundial 2010, cuando dominó, pero acabó perdiendo ante Suiza (0-1).

Casillas sorprendió con su nueva imagen en el último entrenamiento en el escenario del segundo encuentro de España en el Mundial de Sudáfrica, el estadio Ellis Park de Johannesburgo.

Se ejercitó sin la barba que ha mostrado durante el último año, desde que se la dejó por una broma con su madre por el gran parecido que tiene a su padre.

Iker, jugador con supersticiones, ha querido cambiar su imagen después de que la suerte no acompañase a España en el primer partido del Mundial.

España se juega sus opciones de clasificación en el Mundial ante Honduras este lunes.