Superado el trance del regreso a la Liga BBVA, el Levante UD se ha instalado en otra dimensión tras la victoria ante la Real Sociedad. Los complejos de las primeras jornadas han dado paso a la confianza y el buen rollo ha vuelto al vestuario, donde se siente de nuevo el espíritu del ascenso de la pasada temporada. Todo entraba en los planes de los menos pesimistas, entre ellos la mayoría de futbolistas que integraron el proyecto anterior. "Que no cunda el pánico", fue el mensaje enviado al término de la tercera jornada, cuando el equipo se hundía en el fondo de la clasificación con el casillero de puntos inmaculado. Cuatro semanas después, los buenos presagios se han cumplido. Todo era cuestión de adaptación, de no perder los nervios. El Levante UD está ahora instalado cómodamente en la zona media de la clasificación y afronta las dos visitas consecutivas -al conjunto azulgrana le llegan en el mejor momento- con la moral por las nubes.

Ni la plaga de lesiones ha evitado la progresión del Levante UD desde aquella segunda derrota en Orriols. Fiel a sus costumbres del curso pasado, el equipo no ha claudicado en ningún momento y se ha aferrado a la fuerza del grupo para superarse jornada a jornada. La música, tan motivadora antes de los partidos decisivos en el logro del ascenso, sigue sonando con fuerza en el vestuario y en el autobús del equipo. Un síntoma evidencia el estado de ánimo que vive la plantilla: Los jugadores han decidido destinar el dinero de las multas a comprar una cadena musical para los desplazamientos.

Más puntos que en 2007

Tras la disputa de las siete primeras jornadas, el Levante UD acumula ocho puntos en su casillero, los mismos que consiguió en los 19 partidos de la primera vuelta de la campaña 2007-08, la última que completó en Primera División. De hecho, el conjunto que dirige Luis García Plaza ha conseguido sus ocho puntos en las últimas cuatro jornadas, con dos victorias y dos empates.

En la primera vuelta de la campaña 2007-08, el equipo azulgrana también logró dos triunfos, frente al Almería y al Betis, y dos empates, ante el Murcia y el Valencia, pero acumuló 15 derrotas, frente a las tres que ha sufrido en este primer tramo de la Liga. Aquella temporada, iniciada con Abel en el banquillo y continuada por Gianni de Biasi y Juan Carlos Moreno al frente, terminó con el descenso.

La mejor primera vuelta del Levante en Primera la logró en la campaña 2004-05 cuando acumuló 21 puntos al vencer en seis encuentros, empatar otros tres y sufrir diez tropiezos, pero la segunda parte del curso fue desastrosa.

Xisco Muñoz es el último en caer

El centrocampista del Levante Xisco Muñoz estará tres semanas alejado de los terrenos de juego por una microrrotura en el bíceps femoral de la pierna izquierda. El mallorquín se sometió a una resonancia para determinar el alcance de las molestias en los isquiotibiales que le obligaron a retirarse del partido en el choque ante la Real Sociedad el pasado domingo. Así que el futbolista se perderá, al menos, los dos próximos partidos de Liga y el de Copa.

Las buenas noticias llegaron de parte de Rubén Suárez. Las pruebas a las que fue sometido, por unas molestias que sufría en la rodilla izquierda, descartaron cualquier lesión grave y sólo sufre una contusión.Está previsto que el futbolista asturiano esté a disposición del entrenador, Luis García Plaza, para el partido ante el Espanyol, aunque según sea la evolución de las molestias hoy miércoles podría ejercitarse al margen del grupo. Juanfran, por su parte, ha mejorado pero no estará listo para el próximo domingo.