El Power Electronics se mide hoy al Real Madrid como visitante (18.00 horas/Teledeporte) en la cuarta jornada de la Liga ACB para cerrar así una semana complicada. El conjunto de Hussein se ha enfrentado al Regal Barcelona y al Panathinaikos en la Fonteta, ante los que ha cosechado dos derrotas, por lo que viaja a Madrid con la necesidad de un triunfo que ayude a olvidar.

Sin embargo, el técnico canario es consciente de que además de luchar contra el equipo de Ettore Messina, lo tendrá que hacer contra las adversidades en forma de lesiones y molestias.

Hussein prevé un partido "muy duro, con una gran exigencia física y de ritmo". El técnico insistió en que "el principal problema puede estar en que el Power llega después de un desgaste físico muy grande, porque además ha sido centrado en menos jugadores de lo habitual".

Para este partido, no podrá contar con los lesionados Nando de Colo y Jeremy Richardson, que ya no participaron el jueves en el debut de la Euroliga. Además, tres jugadores -Robertas Javtokas, José Simeón y Serhiy Lishchuk- lo hicieron con molestias que todavía arrastran.

El conjunto taronja apelará al bloque, como ya hizo contra el conjunto griego para tratar de paliar la falta de rotaciones durante el partido. Además, el Power Electronics tiene como talón de Aquiles las pérdidas de balón en esta arranque de temporada, que en gran parte le costaron el partido contra el Panathinaikos.

El preparador de los valencianos confía en que jugadores como Rafa Martínez, Víctor Claver y Dusko Savanovic, den un paso al frente en el partido de mañana con el fin de romper la racha negativa de resultados en la pista del Real Madrid, donde hace cinco temporadas que no consigue una victoria.

Por su parte, los locales habían comenzado en la ACB con pleno de victorias, con buenas sensaciones de algunos jugadores y el paulatino acoplamiento de algunos de los nuevos. Sin embargo, el estreno europeo en Atenas estropeó los números, aunque el equipo dio la cara durante los primeros cuartos.