«He pedido perdón a todos por lo que pasó en Madrid. Todo el mundo se equivoca alguna vez y espero que no se hable más de mí por esto. Di la cara. Pedí perdón a a mi club, a mi familia, a mi gente», aseguró ayer Pedro Botelho, el primer fichaje del club en el mercado de invierno. El brasileño, presentado ayer antes del partido ante la prensa, pasó página, por tanto, al grave incidente de hace unos días cuando pasó la noche en comisaría en Madrid por golpear un coche de la policía, darse a la fuga, dar positivo en el control de alcoholemia posterior y no tener en regla el carnet de conducir. El brasileño, de 22 años, está cedido por el Arsenal y deja el Rayo, donde no jugaba por mal comportamiento. EL Levante UD le da la oportunidad de rehabilitarse como jugador. «El mister (JIM) es mi amigo y vengo con mucha alegría. Hubiese entrado en la convocatoria hoy (por ayer) mismo», aseguró tras conocer a sus compañeros en el hotel de concentración. El presidente, Quico Catalán, le pidió compromiso. «Bienvenido al Levante UD, a veinte partidos apasionantes. Espero que defiendas la camiseta igual que tus compañeros. Este proyecto es muy ilusionante. Vienes a un club humilde. Mi agradecimiento porque sé que has luchado para reconducir tu vida deportiva», explicó el dirigente desde el palco de cristal, mientras los primeros aficionados ocupaban sus asientos.

El césped, en mal momento

Con más de cuarenta años de edad, el césped del Ciutat de València no vive sus mejores momentos. El rigor invernal se nota, especialmente, en el área de la Grada Orriols, la misma zona que sufrió muchos desperfectos en un concierto de Bruce Springsteen hace ya unos años. Puede que haga falta una inversión. Por los cuidados de Raimon y sus ayudantes no será.

La Copa ha hecho daño

La derrota copera ante el Valencia ha hecho mella en el ánimo del levantinismo más ancestral. El discurso victimista (el mismo que se respira en Mestalla cuando el Madrid desanima al vecino) ha regresado a algunos sectores o entorno del club. Todos tranquilos. El jueves (21.30 horas) hay una oportunidad de demostrar que no existe el complejo de inferioridad en Orriols.

Ballesteros, un «granota» más

El capitán del Levante UD, Sergio Ballesteros, vivió ayer el partido desde la grada por cumplir sanción. El Papi aprovechó para hacerse fotos con los aficionados y responder a los saludos de niños y mayores. El defensa valenciano es un ejemplo, un icono del levantinismo moderno.

El Zaragoza, sin apoyo

El Zaragoza regresó a Orriols meses después de conseguir la permanencia, en el mismo estadio. Esta vez, apenas tuvo apoyo desde la grada.