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El delantero del Málaga Fabrice Olinga ha irrumpido en la gran escena del fútbol español convirtiéndose en el jugador más joven en marcar un gol en la historia de la Liga. El atacante camerunés marcó en la jornada inaugural contra el Celta de Vigo con solo 16 años y 98 días, pulverizando todos los récords de precocidad y dando los tres primeros puntos del campeonato al conjunto de Manuel Pellegrini.

Por un camino paralelo al de Olinga transitan uno de los jugadores más prometedores de la cantera del Valencia, sus compatriotas, el lateral derecho Serge Leuko (1993) y el mediocentro ofensivo Cedric Mandjeck (1994). El representante valenciano Javier Cordón tiene buena parte de culpa del aterrizaje de los tres jugadores en el fútbol español. Todo empezó en julio de 2008, en la Costa Blanca Cup de Benidorm, en la que compareció un combinado sub'16 de la Fundación Samuel Eto'o, que cuida la carrera y formación de centenares de jugadores cameruneses hasta los 18 años. Cordón asistió al torneo y ofreció a Marcos Martín, director de fútbol base del Mallorca, la posibilidad de tener a prueba a varios futbolistas: "Me pidieron un lateral del 93 y un atacante del 96". Leuko cumplía con las condiciones del primer caso y la Fundación aconsejó a Cordón que ofreciese a Olinga, que no había participado en el torneo -tenía 13 años- pero del que hablaban maravillas. "Sin tener ni siquiera un video", recuerda Cordón, el Mallorca aceptó la propuesta.

"Lateral con recorrido"

Olinga, que pasó a ser representado por Pepe Mesas, se quedó hasta 2011 en el Mallorca. Leuko, cadete de segundo año, permaneció en el club bermellón hasta juveniles, cuando fue descartado: "Lo veían como central pero sin la altura suficiente", indica Cordón, que le encontró un hueco en el Torre Levante de Orriols. Llamado con 17 años al Mundial sub-20, Leuko no tardaría en ser llamado por el Valencia. "Es un lateral muy fuerte físicamente, de largo recorrido. Olinga ha quemado etapas más rápido", afirma Cordón, que se ha convertido con la mayoría de edad del jugador en su representante. Capitán de Camerún sub-20, esta campaña ya forma parte del Mestalla y ha entrenado a las órdenes de Mauricio Pellegrino. El club le ve como un gran lateral de futuro y un recambio de garantías, hoy mismo, si no se pudiera contar con João Pereira o Antonio Barragán.