Ha llegado la hora de la verdad para los valencianos. La organización ultima la preparación de una preciosa cancha de Llargues que acogerá a cientos de espectadores y que culminará este campeonato del Mundo. El juego a Llargues, originario de la organización que hoy bajo el lema de Unir en la Diversidad, aglutina a países de diversos continentes, se convierte en el referente indiscutible. Pueden avanzar otras modalidades, que avanza imparables, como el One Wall, pero los partidos de Llargues seguirán manteniendo ese sabor inconfundible a vino añejo.

Comienza el torneo en el que, una vez más, los valencianos tendrán a belgas y holandeses como principales rivales. Habrá que estar atentos a los colombianos que llegan con un saque espectacular, dicen que el más poderoso que se ha visto por las tierras del Putumayo o de Cali. También saca «per dalt», siguiendo la escuela del legendario Mena y que con tan buen criterio han heredado jugadores como Alvaro de Tibi, Juanjo de Borbotó o el mismo Santi de Finestrat.

El ambiente en la selección ha mejorado ostensiblemente. Se notó en la jornada de ayer con más alegría en todas las partidas, tanto del juego frisón como del One Wall. En esta modalidad asistimos a un espectacular duelo de cuartos de final entre valencianos e ingleses. Triunfo valenciano que, en cierto modo, nos sirve de revancha de lo visto en el Europilota. Los protagonistas de este gran éxito, en ese camino de perfeccionamiento en una modalidad que emerge y se impone con mucha fuerza, fueron Pablo de Sella y Rodrigo de Benidorm. Perfectamente compenetrados vencieron a los poderosos rivales.

Estos jugadores plantaron cara a la poderosa formación de Puerto Rico a la que pusieron contra las cuerdas ante el asombro general. En el primer set les igualaron a nueve y flotaba en el ambiente la que hubiera sido sorpresa mayúscula del mundial. Finalmente se impuso la experiencia puertorriqueña al mismo tiempo que México ganaba a Bélgica.

El nivel de juego entre los países europeos y los grandes pelotaris de la isla caribeña, de Miami, Nueva York o California sigue siendo considerablemente favorable a los americanos. En el campeonato femenino, resaltar el gran éxito valenciano al lograr la medalla de plata en un juego que ha gustado como el autóctono de Frisia.

Álvaro ejerce de capitán

El gran saque de Tibi, es, sin duda, el líder de la selección. En él hay plena confianza, y en los restos impresionantes de Santi, en gran momento de juego, al igual que Pablo de Sella o Héctor de Laguar. Hay mucha ilusión en salir de este Mundial con la cara alta, como corresponde a la historia de la selección valenciana.