Héctor Giner Tarazón, un joven árbitro de Valencia, perdió el pasado domingo el bazo como consecuencia de la brutal agresión que presuntamente recibió por parte de un veterano jugador del Mislata UF «B», que se enfrentaba a Los Silos CF «A» en el Polideportivo Municipal de Burjassot. El colegiado, de 17 años, fue agredido después de expulsar al jugador cuyas iniciales corresponden a A. M. M., un agente del Cuerpo Nacional de Policía que estaba destinado en la Unidad de Protección y Seguridad (UPS) de la Brigada de Seguridad Ciudadana, según confirmó ayer Levante-EMV. El agente fue detenido por compañeros de la comisaría de Burjassot y, tras pasar la noche en el calabozo, pasó a disposición judicial.

El partido, correspondiente a la jornada 21 del Grupo VII de la Segunda Regional de fútbol, enfrentaba en Burjassot al equipo local, Los Silos «A», contra el Mislata UF «B». El encuentro discurría sin mayores contratiempos hasta que en el minuto 42 de la segunda parte el joven colegiado señaló una falta contra el conjunto visitante, según relató a este periódico José Giner, padre del árbitro agredido y presente en el polideportivo municipal junto al resto de la familia. Inmediatamente, el presunto agresor se dirigió a Héctor Giner y le dijo «árbitro eres un subnormal», tal como explicó posteriormente Héctor a su padre. Acto seguido, el futbolista fue expulsado con roja directa.

El presunto agresor, que tiene 27 años, reaccionó de manera violenta ante su expulsión y, mientras el colegiado apuntaba la tarjeta roja en su cartulina, le propinó un tortazo en la cara al colegiado, de 17 años. El adolescente cayó y, cuando ya se encontraba tendido en el suelo, el policía le propinó dos fuertes patadas, una en el costado y otra en la espalda. Testigos presenciales de la agresión relataron a Levante-EMV que los golpes «los dio con ensañamiento y como si estuviera fuera de sí».

Varios miembros del conjunto local se lanzaron sobre el jugador para separarlo, mientras otros atendían al árbitro. El agresor se echó a llorar tras darse cuenta de la gravedad de su acción. «Se me ha ido la olla», aseguran que dijo el agente A. M. M., tanto en el campo de juego, como más tarde, cuando sus compañeros le estaban tomando declaración.

«Fui a socorrerlo corriendo al campo y mi hijo me pidió que nos fuéramos al vestuario», explica su padre, que presenciaba el encuentro desde la grada. El partido se suspendió cuando el marcador reflejaba 2 a 2 y la directiva de Los Silos procedió a cerrar las instalaciones «para que nadie se marchara». Tras avisar a la policía y al 112, al campo municipal de Burjassot acudió una ambulancia que trasladó al árbitro al hospital Arnau de Vilanova.

Perdió tres litros de sangre

Héctor Giner ingresó poco después de las dos de la tarde en el centro sanitario donde se le practicaron diversas pruebas, y se le diagnosticó la rotura del bazo, un derrame en el abdomen y fractura de una costilla. A las 19.20 horas, el joven árbitro entró en el quirófano, donde le extirparon el órgano dañado y perdió cerca de tres litros de sangre.

Héctor evoluciona favorablemente y ya se encuentra en planta, donde ayer prestó declaración ante varios agentes de la Policía Nacional. «Héctor está tranquilo y relajado, con calmantes, pero está abatido y nos ha dicho que deja el arbitraje», explicó su padre José a este periódico.

Héctor es estudiante de Bachillerato y según su familia no quiere dedicarse al arbitraje profesionalmente. «Esto se ha acabado para él. Lo hacía porque le gusta mucho el deporte y también porque era una forma de sacarse un dinero para sus gastos. Él lo tiene como una afición, pero se ha terminado», zanjó José Giner.

El Mislata expulsa a su jugador y Los Silos anuncia un homenaje al colegiado

Héctor Giner Tarazón recibió ayer numerosas visitas en el hospital Arnau de Vilanova, donde permanece ingresado tras extirparle los médicos el bazo. Además de la familia y los amigos, por el centro médico se pasaron responsables de los dos equipos que disputaban el partido.

En representación del equipo local, Los Silos, visitaron al joven árbitro el entrenador, el delegado y el capitán del equipo, quienes trataron de animar al colegiado. «La verdad es que lo hemos visto bastante abatido. Nos ha dicho que se va a dejar el arbitraje y sabe muy mal todo esto. Le hemos explicado que esto es una situación excepcional, que el fútbol no es así y que ha tenido mala suerte», explicó a Levante-EMV el técnico del conjunto de Burjassot, Francisco Herrero. Los Silos tiene previsto homenajear al joven Héctor «para animarle y que no deje de pitar», avanzó Herrero.

También visitaron a Héctor varios miembros en representación del Mislata UF de la segunda regional, el club donde hasta ayer jugaba A. M. M., presunto agresor del árbitro. La directiva ha decidido expulsar al jugador, que según el club de l´Horta ha mostrado su total arrepentimiento por la terrible acción del pasado domingo.