El fichaje de Gareth Bale por el Real Madrid cifrado en 91 millones de euros por el club blanco, es el segundo traspaso más caro de la historia, ligeramente por debajo de los cerca de 96 millones que el equipo de Chamartín pagó en 2009 por Cristiano Ronaldo. En cualquier caso, si tal y como manifiesta el Tottenham la cantidad final pagada por el Real Madrid fuese de 101 millones de euros, entonces el fichaje del galés se convertiría con diferencia en el más caro de la historia.

Con este nuevo fichaje, el Real Madrid ha protagonizado los tres refuerzos más cuantiosos de la historia del fútbol: Bale, Cristiano Ronaldo y el francés Zinedine Zidane, que le costó unos 72 millones de euros desde el Juventus de Turin en el año 2001.

Los fichajes del sueco Zlatan Ibrahimovic, del Inter de Milán al Barcelona en 2009 en una operación valorada en 69 millones (48 millones más el camerunés Samuel Eto'o), y del brasileño Kaká, del Milán al Real Madrid en 2009 por 65, completan los primeros cinco puestos en el ránking de traspasos más caros.

Algo menos costaron el uruguayo Edinson Cavani, fichado este verano por el París Saint Germain por 64 millones; el portugués Luis Figo, del Barcelona al Real Madrid en 2000 por 60; el colombiano Radamel Falcao, del Atlético de Madrid al Mónaco el pasado mayo por 60; y Fernando Torres, del Liverpool al Chelsea por 58 millones de euros. Le siguen Neymar, fichado este verano por el Barcelona procedente del Santos (57 millones); y el brasileño Hulk, del Oporto al Zenit en 2012 por 55 millones.