Antonio Núñez Celda recibió el pasado sábado en su pueblo, Quart de Poblet, un homenaje especialmente emotivo. Las gentes que le vieron crecer como pelotari estuvieron con su familia. Los dirigentes del club local han estado a la altura que merecía una de las grandes figuras de la historia de la pilota valenciana. Dicen que los recuerdos y los sentimientos que se impregnan en el corazón son los provocados en la juventud, cuando las primeras sensaciones emotivas brotan en el alma de cada uno de nosotros. Por eso, las gentes que el sábado se acercaron a Quart de Poblet fueron mayoritariamente las que le vieron crecer en los frontones, cuando sus primeros pasos hacia las cumbres de este deporte.
Estuvieron dos vicepresidentes de la Federació de Pilota Valenciana que testimoniaron con placas conmemorativas a sus familiares el afecto de la institución que dirige este deporte . Y estuvo presidiendo el acto la alcaldesa Carmen Martínez. El Ayuntamiento se ha volcado con el club para que el acto saliese redondo, como así sucedió. Nadie duda de que Núñez, al igual que el Xiquet de Quart tendrá su memorial, su recuerdo cada año con una partida especial. Mientras haya semillas de futuro en esta localidad, y hay una escuela muy numerosa, habrá un recuerdo especial para quien nunca renegó de su origen. Junto a sus familiares, padres, hermana, viuda e hijos, los aficionados que abarrotaron las gradas y entre ellos un montón de viejas glorias llegadas de los pueblos donde el pelotari dejó su sello. Del mundo del trinquete vimos a Voro de Montserrat y a Pedro de Pelayo.Se jugaron dos partidas de frontón en las que participaron los primeros espadas de la especialidad, aquellos surgidos en el seno del club, al calor de la irrupción de su figura, junto con otros compañeros llegados de otros pueblos como Adrián de Museros, Montesa, Alejandro de Paterna... Especial mención merece el trabajo de Aurelio de Quart y su hijo Adrián, pelotari de proyección, junto con Ignacio Ramos, sobre los que ha gravitado gran parte del trabajo preparatorio, junto a los técnicos municipales.
