El Levante empató con el Valladolid el pasado martes, en la sexta jornada de la Liga en el estadio Ciutat de València, y ya lleva medio año sin conseguir ganar ante su público, mientras que su técnico Joaquín Caparrós suma ya un año entero sin lograrlo.
El Levante acumula ocho encuentros seguidos sin vencer en casa, lo que supone su peor racha en la Liga BBVA. En el caso de Caparrós, son ya 12 choques sin ganar como local, entre los que lleva con el conjunto valenciano y los que acumuló con el Mallorca la pasada campaña.
El último triunfo liguero como local del Levante se produjo el pasado 31 de marzo, cuando se impuso por 1-0 al Sevilla, con un gol de Rubén García en la jornada 29 de la pasada campaña. Desde entonces han pasado ya casi seis meses.
Tras ese triunfo, el Levante, que solo jugó ya partidos ligueros, cerró el pasado ejercicio con cinco encuentros seguidos sin ganar en casa. El balance fue de tres derrotas, ante el Deportivo de La Coruña, el Celta de Vigo y el Rayo Vallecano; y de dos empates, ante el Zaragoza y el Betis.
En esta nueva temporada, el conjunto que ahora dirige Joaquín Caparrós ha añadido otros tres empates a esta serie, pues antes del logrado ante el Valladolid, los firmó con el Sevilla y la Real Sociedad, en ambos casos sin goles.
Por su parte, con estos tres empates, Caparrós lleva ya más de un año sin ganar ningún partido como local. La última vez que venció en casa fue el 23 de septiembre de 2012, cuando con el Mallorca, derrotó 2-0 al Valencia en la jornada 5 de la pasada campaña.
Tras ese triunfo y antes de ser destituido en el club balear, Caparrós jugó nueve choques más como local. Siete fueron de liga, con un balance de cinco derrotas y dos empates, y dos de Copa, con una derrota y un empate.
Con los tres empates cosechados al frente del Levante, el técnico de Utrera suma seis derrotas y otros tantos empates en sus últimos doce encuentros como local.
En el partido contra el Valladolid, además, el Levante desperdició un penalti y jugó contra diez toda la segunda parte, pues la primera acabó con la expulsión del visitante Bergdich por cometer una pena máxima en la que Diego Mariño detuvo el lanzamiento de Andreas Ivanschitz.
Ahora, tras visitar este domingo al Osasuna, en la octava jornada tanto el Levante como Caparrós, tendrán una nueva oportunidad para romper sus rachas, aunque para hacerlo deberán derrotar al Real Madrid.
