El Valencia ha suspendido de empleo al francés Adil Rami por una falta tipificada como "muy grave" por el código interno de la entidad, que ha llevado a abrir un expediente al jugador.

Según explicaron fuentes del club, se trata de una medida cautelar y ahora el jugador tiene cinco días para presentar sus alegaciones. Una vez lo haga, la entidad tiene un plazo similar para decidir la sanción definitiva del jugador.

Rami se reunió hoy con el presidente del Valencia, Amadeo Salvo, durante más de una hora en las oficinas del club y el jugador dio su versión sobre las declaraciones del pasado martes, cuando acusó a sus compañeros de "pelotas" y a Djukic de no hablar a la cara, lo que motivó su expulsión del hotel de concentración en Granada.

Mientras se prolongue esta situación el jugador no tiene que ir a entrenarse a Paterna y tampoco podrá acceder a la ninguna de las instalaciones del club.

Según explicaron fuentes de la entidad, al estar denunciado el apartado de sanciones del convenio colectivo de la AFE el proceso se rige por el código interno del club.

Este código impone sanciones que van desde las multas económicas a la suspensión de sueldo e incluso a la rescisión de contrato, según sea la gravedad de la acción castigada.