La Federación Estadounidense de Natación podría dejar competir finalmente a Michael Phelps en los Mundiales de este verano que se celebrarán en Kazán (Rusia), pese a la sanción que recae sobre el de Baltimore por ser detenido mientras conducía ebrio y por excederse en el límite de velocidad el pasado mes de diciembre.

Por este motivo, el ganador de 22 medallas olímpicas está sancionado seis meses por un castigo que finaliza en abril, pero su federación también le prohibió acudir a la cita de principios de agosto como sanción adicional por su comportamiento. Sin embargo, el director ejecutivo de USA Swimming, Chuck Wielgus, abrió una puerta a la participación de Phelps en Kazán. «Es complicado, pero hay maneras en las que podría suceder. Hay un camino para que las cosas se reconsideradas o consideradas», admitió en «ESPN.com».

Por su parte, el nadador, que tiene que cumplir un año de prisión en libertad condicional y completar un tratamiento contra el alcoholismo, aún no ha hecho ningún comentario público sobre esta intención de nadar en los Mundiales.