La comisión ejecutiva de la Fundación del Levante UD, máximo accionista del club con el 74% por ciento de los títulos, se reúne mañana para valorar la petición del expresidente del club José Luis López de comprar 6.000 acciones. El empresario valenciano ha puesto como requisito que su compra se efectúe antes de la Junta General Ordinaria de Accionistas, fijada para el 19 de diciembre. Ese mismo día, de hecho, quiere hacer valer su propiedad accionarial para delegar en el Foro de Responsabilidad y Opinión Granota (FROG) y en las peñas. La pelota, por tanto, está en el tejado del patronato.

La situación, por otro lado, no queda clara por las normas que rigen el club respecto a comprar acciones con menos de un mes de antelación a la asamblea.

La oferta de José Luis López, que desembolsaría 400.000 euros por las 6.000 acciones, ha de pasar obligatoriamente el filtro de la Fundación. La comisión ejecutiva es la encargada de dar luz verde a la operación, puesto que existe un límite de compra de 100 títulos y toda transacción que supere esa cantidad debe ser validada por sus miembros.

José Luis López quiere dar este paso «en el marco del actual proceso de apertura de la institución» y por la necesidad de «dotar» a la Fundación de una «saludable independencia». El presidente del club entre 1993 y 1995, en pleno asalto a Segunda A, pasaría a contar con más del cinco por ciento del capital social del club, una situación que le daría derecho a nombrar un consejero antes de la junta.

Mañana, por tanto, la comisión ejecutiva de la Fundación la tomará la decisión de si le vende el 7% de sus acciones (maneja 86.413 títulos de un total de unas 125.000 del Levante UD, es decir, el 69,23%) a López. El empresario votó, en su día, en contra de la venta de la mayoría accionarial al norteamericano Robert Sarver. Si consigue cerrar la operación, daría un paso hacia la democratización de la entidad y permitiría desahogar las cuentas de la Fundación. El club aporta anualmente 400.000 euros de los 600.000 de los gastos del Patronato.