Bojan Dubljevic (Niksic, Montenegro, de 25 años) sigue de moda. El pívot montenegrino del Valencia Basket firmó un partido de escándalo el pasado sábado ante el Obradoiro en la Fonteta con 26 puntos, 8 rebotes y solo tres lanzamientos errados, con pleno en los 5 triples convertidos, para sumar 38 créditos de valoración y erigirse en el mejor jugador de la 31ª jornada de la Liga Endesa.

Esta nominación repitió la conseguida en la 24ª entrega del campeonato, aunque los números ante el conjunto gallego este fin de semana han sido los mejores firmados por el montenegrino desde su llegada al Valencia Basket en la campaña 2012-13.

Con contrato hasta 2018, Dubljevic nunca ha ocultado su deseo de seguir en Valencia, aunque bien es cierto que el interés de otros clubes siempre ha estado latente, incluido el seguimiento que se le viene realizando desde los Estados Unidos.

Sin ir más lejos, el pasado sábado un ojeador de la NBA estuvo presenciando el choque entre los valencianos y el Obradoiro y uno de los nombres marcados en rojo era el del Bojan Dubljevic. El pívot taronja fue elegido en 2013 por los Minnesota Timberwolves en segunda ronda tras concluir su primera campaña en Valencia.

Esta franquicia apostó por los talentos de Montenegro tras haber apostado por su compatriota Pekovic y previendo un salto de Dubljevic en un plazo de dos años tras foguearse en Europa. Este hecho nunca se produjo al tener el hándicap de su envergadura y los ánimos del propio jugador que, sin la intención inicial de asentarse en Valencia, encontró en la Fonteta el sitio ideal para crecer y conseguir sus primeros títulos.

Ahora mismo, en el Valencia Basket no hay constancia de que la NBA pueda echar sus redes sobre él de manera inmediata, pero evidentemente una opción formal podría cambiarlo todo.

En las oficinas del club valenciano se tiene en cuenta que a sus 25 años, Dubljevic se encuentra en la edad ideal para seguir explotando toda vez que su progresión ha sido evidente y presenta una experiencia más que consolidada.

Jugar la Euroliga se antoja clave para evitar las llamadas a su agente y aunar un proyecto que puede girar en torno a él. Y es que su eclosión en España también ha tenido continuidad en Europa con su entrada en el mejor Quinteto de la Eurocup.

Desde el entorno del jugador, la consigna ahora mismo es clara y no pasa por otra cosa que aspirar a ganar la Liga Endesa. Ambicioso al máximo, el pívot taronja aspira a hacer un buen final de la liga regular que permita al equipo taronja llegar posteriormente hasta la final del Playoff y soñar con un título.

«Quiero ganar un título». Es la misma frase que Dubljevic comentó a este periódico en la previa de la Final de la Copa del Rey y de la Eurocup. La ambición no tiene límites y las quiere consumar en Valencia. La NBA puede esperar.